El bloqueo afecta entendimiento entre Cuba y Estados Unidos
Por Pedro Paneque Ruiz/ Radio Cadena Agramonte.
Camagüey, 27 oct .- Una vez más, la irracionalidad con que los gobernantes norteamericanos han pretendido aislar a Cuba se pone a prueba. Hasta ahora, la votación en Naciones Unidas de la resolución contra el cerco económico, comercial y financiero de la gran potencia contra el pequeño país ha evidenciado una casi total incomunicación de EE.UU. con el resto del planeta —en ese particular—, en tanto esa política no ha hecho más que granjearle al pueblo de la Isla el respeto mundial.
Tal sentimiento ha estado latente en mensajes y visitas de jefes de Gobiernos de diferentes países, y otros amigos, que han expresado al General Presidente cubano su apoyo en la condena al genocida proceder y su admiración por la mayoría de edad demostrada en todo lo concerniente al restablecimiento de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos.
Y en este contexto, no obstante algunas medidas diligentes del mandatario Barack Obama, el bloqueo mantiene todo su espíritu criminal, al prohibirle a Cuba adquirir insumos imprescindibles para la vida de su pueblo en los cercanos mercados estadounidenses, a la vez que aplica sanciones a terceras naciones por comerciar con la mayor de las Antillas.
“Amigos de qué” —como dice la letra de una canción cubana— cuando aprietas el cuello hasta asfixiar.
No es argumentación huera la letra y espíritu del informe anual titulado “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero de Estado Unidos contra Cuba”, que en las últimas dos décadas ha encontrado el apoyo de la abrumadora mayoría de las más de 190 representaciones del mundo en la Organización de Naciones Unidas (ONU).
El documento resalta que aún en este nueva escena “se ha mantenido el recrudecimiento del bloqueo en su dimensión financiera y extraterritorial, lo cual se evidencia en la imposición de multas millonarias contra bancos e instituciones financieras, como resultado de la persecución de las transacciones internacionales cubanas”.
Aunque para los cubanos el fin del bloqueo abrirá una vía expedita para una materialización plena del programa el Moncada, y por tanto de un desarrollo socialista en beneficio propio y hasta para los norteamericanos, no se puede dejar de tener en cuenta que la agresión anexionista de los Estados Unidos contra Cuba tiene una larga historia, pues mucho antes de que nacieran los padres fundadores de la nacionalidad cubana, ya en el Norte planeaban apoderarse de la Isla.
No obstante, proseguimos negociando para normalizar relaciones, pero como ha puntualizado el General de Ejército Raúl Castro, con la premisa indispensable de poner fin al bloqueo y la devolución a Cuba del territorio ocupado ilegalmente en Guantánamo.
En el mensaje del líder de la Revolución cubana a la Federación Estudiantil Universitaria, el 26 de enero de 2015, en el contexto del aniversario 70 de su ingreso a la Universidad de La Habana, Fidel Castro precisa que “defenderemos siempre la cooperación y la amistad con todos los pueblos del mundo y entre ellos los de nuestros adversarios políticos”
Así, con esa amplitud de pensamiento e hidalguía revolucionaria se presenta hoy Cuba en la ONU, para exponer sus argumentos y seguramente escuchar una nueva condena de la comunidad internacional sobre el genocida cerco a la Isla, aunque sin obviar que el bloqueo bloquea el entendimiento entre Cuba y Estados Unidos.
