[:es]Defiende Cuba en ONU compromiso internacional con los Derechos Humanos [:]
[:es]Ginebra, 4 mar.- El representante de Cuba Pablo Berti abogó en la sede de la ONU en Ginebra por una mayor protección a los derechos humanos en diversos ámbitos como las garantías laborales, el acceso a la vivienda y el disfrute de la cultura.
Al participar en diversos foros celebrados durante el 34 período ordinario de sesiones del Consejo de Derechos Humanos, el diplomático defendió la postura de la isla basada en profundos valores humanistas, éticos y morales.
En un debate sobre las políticas de austeridad aplicadas en muchos países a raíz de la crisis económica, Berti afirmó que tales normativas requeridas por las instituciones financieras internacionales fomentaron la violación o erosión de los derechos de los trabajadores.
“La imposición de medidas como la congelación o reducción de los salarios y los salarios mínimos, en el marco de la austeridad, tienen una consecuencia lógica en los derechos humanos de los trabajadores”, señaló el diplomático.
El representante de la nación caribeña también intervino en un diálogo sobre las transformaciones financieras ocurridas en el mercado de la vivienda, la cual se ha llegado a considerar una mercancía.
De acuerdo con el diplomático, “se necesita un cambio para que los Estados velen por que todas las inversiones en vivienda tengan en cuenta su función social y no se limiten solamente al aspecto mercantil de las mismas”.
En un foro sobre el acceso a la cultura, Berti afirmó que se trata de un componente esencial del desarrollo humano; una fuente de identidad, innovación y creatividad para las personas y las comunidades; así como un factor importante para la inclusión social y la erradicación de la pobreza.
Abogó en ese sentido por “fomentar el pluralismo cultural, contribuyendo a un intercambio más amplio de conocimientos y a la mejor comprensión del patrimonio y los antecedentes culturales”.
El representante cubano también participó en un diálogo sobre la tortura y recordó que antes de 1959, los tratos crueles, inhumanos y degradantes eran la práctica común de las autoridades en la isla.
Sin embargo, agregó, la Revolución cubana, de profundo contenido humanista y ético, puso fin a esa política. (Texto y foto: PL)[:]