Cuba y EE.UU. en el reto de una mejor relación

La Habana, 23 nov.-El virtual triunfo del demócrata Joe Biden en las elecciones en Estados Unidos proyecta una eventual mejoría de las relaciones con Cuba, un escenario con retos para el intercambio de acuerdo con el analista Santiago Pérez.

 

La probable llegada del exvicepresidente de Barack Obama a la Casa Blanca presenta el retorno al proceso de acercamiento de la anterior administración demócrata, aunque con algunos riesgos, dijo a Prensa Latina el también subdirector del Centro de Investigaciones de Política Internacional.

‘Obama flexibilizó la política hacia Cuba, se establecieron relaciones diplomáticas y 22 instrumentos bilaterales en áreas de cooperación bajo el concepto de que la mejor manera de llevar la ‘libertad’ a la isla era cambiando los métodos que no habían dado resultado con el hostigamiento’, aseguró.

Las proyecciones de Biden durante su campaña coinciden con el concepto aplicado entonces, ‘una propuesta que basa su lógica en el supuesto derecho de Estados Unidos para cambiar a la nación’, añadió el investigador.

‘Esta filosofía no acepta que somos un país soberano, que se lo ha ganado y, por el contrario, supone exigencias para reducir las presiones sobre la isla’, dijo el también jefe del Programa Nacional de Investigaciones de Relaciones Internacionales.

Entre sus directrices, el acercamiento pone acento en el empoderamiento de la comunidad cubana en Estados Unidos y el sector privado, a la vez que señala el tratamiento a los derechos humanos en la mayor de las Antillas.

La victoria de Biden ocurre en paralelo con sustanciales cambios económicos y sociales en Cuba, entre los que destacan el reordenamiento monetario, la búsqueda de alternativas más eficientes para la empresa estatal socialista y mayores posibilidades para la importación y exportación de privados.

En ese escenario, la llegada del virtual presidente electo favorecería el contexto para el intercambio con la isla caribeña, en particular luego de cuatro años de presiones extremas durante el gobierno de Donald Trump.

Sin embargo, a juicio del analista, existen elementos desfavorables para una mejor relación, como las acusaciones durante la campaña electoral sobre los vínculos de los demócratas con el socialismo.

‘Muy probablemente durante un tiempo siga esta asociación, lo que derive en que que Biden no haga ningún cambio sustancial hacia Cuba para desmarcarse de esas teorías’, señaló.

A esto se suma una posible victoria de los republicanos a lo interno del Senado.

‘En ese caso, senadores como Marco Rubio o Ted Cruz mantendrían su influencia en ese ente y Biden encontraría mucha resistencia para eventuales cambios favorables hacia Cuba’, auguró.

Las transformaciones importantes tras el mandato de Donald Trump pudieran asociarse con las principales medidas de la administración de Obama que favorecieron a la isla, entre las que destacan las remesas y mayores posibilidades de viajes e intercambio con La Habana.

‘Se trata en todo caso de adelantar un poco el retroceso, aunque no con cambios fundamentales porque el panorama y los factores políticos al interior de Estados Unidos no son favorables al acercamiento’, reconoció.

Otra cosa serían las presiones que pudieran hacer dentro del Partido Demócrata algunos sectores, pero esos son expedientes a lo interno de la política de Estados Unidos, concluyó. (Prensa Latina)