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Criocirugía en Cuba, el resultado de una pasión

La Habana, 30 ago.- La doctora Martha Ortega es una de las pioneras de la Criocirugía y de la especialidad en Cuba, un proceder que despierta en ella una gran pasión al constatar una notable mejoría en la calidad de vida de sus pacientes.

 

De acuerdo con la literatura científica, la Criocirugía se define como el método quirúrgico que permite la destrucción controlada de tejidos en un área determinada, en donde se aplican muy bajas temperaturas a una lesión para causar destrucción local con posterior desprendimiento del tejido lesionado.

El prefijo crio- se deriva de la palabra griega kruos, que significa frío.

Muchas veces la palabra Crioterapia se usa indiscriminadamente por Criocirugía, aunque la Criocirugía, cirugía Criogénica, Crioablación o Criocoagulación, son descripciones más precisas de los tratamientos modernos de congelamiento de tejidos para conseguir reacciones terapéuticas.

El término Crioterapia hace referencia a la utilización del frío como ayuda terapéutica por sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas, y por no destruir tejidos; por lo tanto, es un error usar crioterapia como sinónimo de criocirugía.

Ortega, doctora del Hospital clínico quirúrgico ‘Hermanos Ameijeiras’ es una mujer que conserva su belleza, es activa y pausada, de un hablar seguro que reafirma la sabiduría en el campo de la Medicina, en especial la rama de Otorrinolaringología.

Ella desborda humildad y sencillez, y solo presume de ser una cubana para todos los tiempos y revolucionaria desde los pies hasta la cabeza.

De más está decir que volvería ser médico si volviera a nacer, y aunque parezca una frase más que transitada, son los pacientes quienes le dan sentido a su vida, esas personas que acuden a ella por ayuda para sanar su dolor, y terminan premiándola con beso, un abrazo y en muchos casos, convirtiéndose en nuevo miembro de su familia.

Con casi una veintena de reconocimientos y condecoraciones, Ortega ya ha transitado un largo camino desde 1988, año en que llegó ese proceder quirúrgico a la mayor de las Antillas desde la extinta Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).

La cirujana, nacida en la barriada del Sevillano, en el municipio capitalino de 10 de octubre, precisó que el equipo utilizado para este proceder en Cuba se denomina Crioeva, el cual lleva las iníciales del nombre del doctor Elio Villarreal Acevedo, quien por estos días está fuera de fronteras trabajando en pos de la Criocirugía y la Crioterapia.

Este método para operar- galardonado con Premio Nacional de Mayor Impacto Económico y Social en 2016 –se realiza con bajas temperatura, a -196 grados centígrados, y en sus comienzos en la isla caribeña se practicó en la especialidad de Oftalmología para tratar las cataratas, explicó Ortega a Prensa Latina .

La Criocirugía es para destruir el tejido, y un aspecto positivo es que el tiempo de exposición es menor y los resultados son mayores, destacó Ortega, quien precisó que la Crioterapia se utiliza para estimular los tejidos.

Dicho proceder –añadió- tiene diferentes aplicaciones, ‘en especial con pacientes con contraindicaciones quirúrgicas o en las personas con más de 45 años de edad con contraindicaciones por la edad’.

La producción de nitrógeno líquido en Cuba no es costosa, y con tan solo un litro se interviene entre 12 y 15 pacientes, y con cada uno de ellos se gastan de tres a cinco centavos, y esto representa un gran ahorro para el país, señaló la profesora auxiliar consultante.

Ortega- líder sindical durante 49 años-puntualizó que más allá de la cuestión del bajo costo de este tipo de intervención , desde el punto social el proceder no afecta la economía de la persona, el bolsillo del cubano, pues no tiene que ausentarse por varios días de su actividad laboral, se va satisfecho y con una mejor calidad de vida.

Agrega Ortega, que la Criocirugía se distingue por sus no complicaciones, se prescinde de la anestesia, no hay peligro de sangramientos y es ambulatoria.

Este tratamiento comienza con una buena indicación, con un adecuado criterio médico, pues no todas las personas reúnen los requisitos para recibirlo, y cuando se pasa por encima de dicho principio el mismo fracasa, alerta la premiada por la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores de Cuba.

Hemos entrenado a médicos de otras provincias, entre ellos ‘cirujanos, estomatólogos, cirugía pediátrica y otorrinolaringólogos pediátricos’, comentó la experta que consulta de 20 2 5 pacientes en una jornada de trabajo, incluso de otros territorios del país.

Justamente, en estos momentos el país intenta adquirir equipos para la Criocirugia y la Crioterapia, adelantó Ortega, quien aclaró que con uno solo de ellos se pueden atender varias especialidades médicas en un mismo hospital.

La ‘ otorrina’ nos invita a imaginarnos a un médico cubano en cualquier país de América Latina o África con un Crioeva y un termo de nitrógeno líquido en su mochila, este galeno antillano pudiera hacer una criocirugía en una casa, una escuela o en una intrincada montaña, y eso no es ciencia ficción.

Ortega alabó la labor humanista de la medicina cubana, alejada del mercantilismo, pues el socialismo toma como centro al hombre.

En otros sistemas políticos no les interesa aplicar la Criocirugia, pues al ser tan barato el proceder, entonces el médico prefiere la cirugía convencional para así cobrar altos honorarios, comentó la experta.

El paciente no es un objeto, es un ser humano, de ahí que uno deba hacer suyo su dolor, crear una canal de comunicación para que nazca en él la confianza en el tratamiento que conlleve a una mejoría o una cura total, manifestó la especialista con el Crioeva en mano.

La profesora auxiliar consultante, con 50 años de graduada y con una misión cumplida en Cambodia, calificó de inolvidable el día en que la Unión Periodistas de Cuba la condecoró con la Orden Félix Elmuza.

Es un honor contar con esa distinción que encierra el respeto de la prensa a mi la labor en el sector de la salud, a mi trayectoria como militante y revolucionaria, y aunque no trabajo para medallas, cada reconocimiento lo dedico a todas las mujeres cubanas de esta bella isla, expresó Ortega quien aseguró que la vida será la encargada de otorgarle la jubilación.

Por Joel Michel Varona/ Reportero de la redacción de Ciencia y Técnica de Prensa Latina