Campaña promovida desde Estados Unidos busca más sanciones de ese gobierno contra Cuba
Washington, 16 ago.- La campaña de desestabilización impulsada hoy contra Cuba busca justificar más sanciones contra el gobierno de la Isla o cualquier acción bélica por parte de Estados Unidos sin importar el dolor de los cubanos, confirman analistas.
Quien dé su opinión sobre Cuba, si no considera las consecuencias de las medidas punitivas establecidas por Washington contra la nación caribeña durante seis décadas, lo único que busca es manipular, aseguró un comentario divulgado en el diario La Opinión, de Los Ángeles.
El texto, del periodista Agustín Durán, señala que esa es la retórica promovida por medios de comunicación, articulistas desinformados, vendidos o algunos youtubers cómplices, muchos de ellos desde Miami, Florida.
Recordó cómo la Casa Blanca reforzó el bloqueo económico contra la mayor de las Antillas con las leyes Torricelli y Helms-Burton en los años 90 del pasado siglo y luego el expresidente Donald Trump (2017-2021) añadió 243 medidas, algunas de ellas en plena pandemia de COVID-19.
A consecuencia de esas sanciones, escasean los alimentos, el combustible, los productos básicos y los suministros médicos, apuntó el autor quien se pregunta cómo los estadounidenses permiten eso y aún así permanecen callados.
Respecto a la política del actual mandatario, Joe Biden, consideró que incumple su promesa de campaña de dar marcha atrás a las decisiones de su predecesor e incorpora nuevas restricciones a pesar del rechazo de la comunidad internacional.
No podemos decir que todo se hace bien en la isla, dijo Durán, pero criticó las acciones encaminadas a tratar de minar y afectar cualquier esfuerzo del gobierno cubano por salvar a su pueblo de esta pandemia.
En ese sentido, la revista de la organización Congreso Norteamericano de América Latina (Nacla) publicó un artículo donde afirma que restar importancia al papel de Estados Unidos refuerza la idea inexacta de que el gobierno cubano merece ser castigado por su “mala conducta”.
Por lo tanto, este enfoque legitima involuntariamente el cerco unilateral, una política que exacerba el sufrimiento de los cubanos, aseveró la publicación firmada por Mikael Wolfe, profesor de Historia de la Universidad de Stanford.
En lugar de intentar influir en el gobierno del país caribeño, tendremos un mayor impacto si nos enfocamos en cambiar la estrategia estadounidense, sugiere Wolfe quien concluye con un llamado a eliminar el bloqueo a la Isla al cual califica de “ilegal, inmoral y altamente destructivo”. (Texto y foto: PL)