Ante la COVID-19 elevan producción de fitofármacos para enriquecer arsenal terapéutico
Guantánamo, 21 mar.- La región cubana más oriental y biodiversa de Cuba, donde está representado el dos por ciento de la flora mundial, buena parte con propiedades bioactivas, potencia hoy la producción de fitofármacos para enriquecer su arsenal terapéutico, incluida una decena de preparados para el tratamiento a las infecciones respiratorias agudas.
Elaborados con materia prima salida de los campos, estos fármacos alternativos contribuyen a la sustitución de importaciones de medicamentos industriales de altos precios en el mercado internacional, muchas veces inaccesibles debido al cruel bloqueo económico de los Estados Unidos a Cuba, el cual impacta negativamente y de forma especial a la rama de la salud.
Los productos naturales tradicionalmente han sido de válido apoyo en programas sanitarios en la Isla, como el de atención a las afecciones gripales, pues los efectos terapéuticos de plantas como la majagua -abundante en Cuba- y otras tantas, son aprovechados con éxito por los farmacéuticos, que ahora incrementan sus elaboraciones frente a la crisis de sanidad mundial generada por la COVID-19.
En la obtención de medicinas con principio activo de origen vegetal la provincia de Guantánamo es habitual baluarte y en las 122 instalaciones de su red de farmacias se comercializan hoy 96 formulaciones -para disímiles dolencias y en diferentes formas-, cinco productos más que en 2019, incluidos cuatro con efectos broncodilatadores, antitusivos, antiasmáticos y expectorantes.
Nelvis Reyes, directora de la Empresa Provincial de Farmacias y Ópticas, precisó a la ACN que a la lista de fármacos se sumaron esta vez los extractos fluidos de orégano, salvia y majagua, ya presentes como jarabes en el cuadro básico, y ahora dispensados en esta nueva presentación también anticatarral, pensada para los pacientes diabéticos que tienen limitado el uso de los arropes.
Estos fitofármacos son elaborados en 18 laboratorios para este fin en la provincia -tres de ellos de gran producción ubicados en el municipio cabecera y los territorios de Baracoa y Niceto Pérez-, garantes cada mes de unas 300 mil unidades físicas de medicina natural, lo cual se traduce en más de siete frascos per cápita.
La especialista señaló que como respuesta a las medidas del país para combatir al nuevo coronavirus, y atendiendo a la demanda de una población cada vez más informada, que acude hoy a los dispensarios, ahora se incrementó también la existencia de jabones medicinales llegados de la industria nacional, y la venta y producción local de gotas homeopáticas antigripales.
Igual crecimiento se aprecia en la disponibilidad de hipoclorito de sodio al uno por ciento, útil para tratar el agua de consumo, no así para el lavado de las manos –dijo- donde lo ideal es el uso de abundante agua y jabón, ni para la desinfección de superficies, para lo cual es preciso solución de cloro de mayor por ciento.
La directora provincial de Farmacias subrayó a la ACN que diariamente su equipo se reúne para evaluar los resultados de cada jornada y dictar las estrategias de abastecimiento para el día siguiente, e hizo un llamado a los pobladores locales a contribuir con la donación de frascos de 30 y 120 mililitros para garantizar que no pare el flujo productivo de hipoclorito y jarabes.
Dentro del plan país para evitar la propagación del coronavirus SARS-CoV-2, causante de la peligrosa pandemia global COVID-19, el sistema de Salud Pública intensifica también en Guantánamo las fabricaciones de nasobucos, las audiencias sanitarias, habilita canales de comunicación ante cualquier duda asociada a la prevención, y extreman las acciones higiénicas, la vigilancia epidemiológica, y otras medidas. (ACN)