Vegetación e historia se vinculan

Vegetación e historia se vinculanPinar del Río, 2 ene .- La ubicación geográfica y la historia van ligadas a la curiosa flora cubana, con unas ocho mil especies, de las cuales la mitad sólo pueden hallarse en el país y gran parte de ellas en la provincia pinareña.
  
Esa elevada proporción de endemismo añade valor a la vegetación nacional, en tanto es especialmente visible en las zonas más antiguas de la Sierra de los Órganos, en Pinar del Río, y en los macizos del oriente de la Isla.
  
Con dos de las seis reservas de la biosfera existentes en Cuba, el más occidental territorio posee plantas consideradas tesoros botánicos como la palma corcho (Microcycas Calocoma), un fósil viviente por su edad, en protección extrema, aseguran directivos del Ministerio de la Agricultura.
  
Mas a escala del país y ante el impacto de la acción humana, los ejemplares autóctonos, es decir endémicos unidos a los llegados por vías naturales, se asentaron en únicamente la cuarta parte del archipiélago, en áreas de difícil acceso o suelos infértiles, pese a representar el 90 por ciento de toda la flora.
  
A partir de 1492 los conquistadores europeos trajeron otros vegetales y desde entonces por ser esta tierra insular una de las encrucijadas de los tráficos marino y aéreo en el mundo, continuó el proceso de introducción de modo intencional e involuntario, a veces.
  
Son esas las denominadas plantas alóctonas que, si bien constituyen sólo el 10 por ciento  del follaje actual, ocupan el 75 por ciento de la superficie geográfica del país, por lo cual la población está más familiarizada con ellas.
  
Esa parte de la flora, informan documentos del CITMA, acoge a los tres cultivos básicos de Cuba : la caña de azúcar, proveniente del Asia Tropical Oriental, el café, de África, y el tabaco, originario de la América del sur no andina.
  
Igual ocurre con el arroz, los frijoles, los cítricos, gran cantidad de viandas, condimentos, frutas e incluso con la flor nacional, la mariposa, oriunda de Asia, y el marabú, la peor maleza, reporta sus orígenes a regiones africanas. (AIN)