Cosechan cangre de yuca de 140 libras en predios santacruceños

Las maravillas de la naturaleza y el amor por la tierra le entregaron una gran sorpresa al santacruceño Klicton Mais, de 86 años de edad, quien gracias a la dedicación de laborar el suelo, obtuvo en su patio un cangre de yuca de 140 libras, lo que representó todo un acontecimiento para el consejo popular Haití, donde reside actualmente y un logro significativo para la agricultura del municipio.

Desde hace 2 años permanecía sembrado este tubérculo que el dueño decidió sacar, pero nunca imaginó su magnitud, pues de un sólo cangre brotaban diez inmensas yucas y la mayor de ellas tenía un peso de 37 libras y midió 1 metro con 60 centímetros.

“Quería desenterrarla ya hace un tiempo pero no pude, entonces un compañero se brindó y la sacó, cuando estaba saliendo la yuca yo me quedé asombrado porque nunca en mi vida había visto una vianda de este tipo tan grande”, expresó Mais.

En palabras de este pequeño agricultor la tierra de su patio es muy buena y fue lo que le permitió alcanzar el alimento en los alrededores de su vivienda, lo que ha constituido una inmensa alegría para él y todos los vecinos de este consejo popular.

Además de ello también la consagrada labor de Klicton, al atenderla en todo momento permitió obtener esta gran aparición, pues al adulto mayor desde muy joven le gustó cosechar la tierra y cuenta con otras plantas de los tipos frutales y medicinales.

Hoy representa para Mais una gran alegría observar el fruto del trabajo que con sus manos realizó y en sus palabras sería una maravilla que todas las plantas de su patio crecieran de la misma forma que esta yuca.

Para Castor Sosa Leiva, vecino del batey, este acontecimiento causó gran admiración en él, pues “eso fue asombroso, porque en 46 años que tengo nunca había sacado un cangre de yuca como ese, y mire que he sacado yucas, pero primera vez que veo algo tan inusual”.

También aseveró que “escarbé la tierra con un azadón y fui sacando una a una las yucas para que no se partieran, porque de lo grande que era el cangre no se podía extraer sin picarles los tubérculos y aquello me dejó sorprendido pues nunca había visto ese tipo de vianda con tal grosor”.

Todo el pueblo de Haití se convocó en la casa de Klicton en el barrio Kingston de la localidad y compartieron con él la satisfacción de que en esta porción de tierra camagüeyana nacieran viandas tan gigantescas como la yuca de 140 libras, que por estos días causa gran sensación entre las personas.

Con la emoción de haber sembrado el tubérculo, este hombre de la tercera edad piensa comer de las viandas, además regalar a algunos vecinos y ya plantó de esta misma cosecha en su patio para continuar deleitándose en años posteriores de las excelencias de su patio.

El anciano santacruceño Klicton Mais, hoy disfruta de esta gran riqueza de la tierra, que con la esmerada labor de cada día, le regaló un cangre de yucas de 140 libras, para poder compartirlas con todos los vecinos de Haití, un suelo en que espera sigan naciendo estas maravillas de la naturaleza. (Glendys Santiesteban Revolta/Radio Santa Cruz)