Mensaje de Putin y ataque terrorista en Chechenia centran semana rusa

Moscú, 6 dic. -El mensaje anual del presidente Vladimir Putin a la Asamblea Federal (Parlamento) y el ataque terrorista en la capital de Chechenia, que saldó con 14 policías muertos y una veintena de heridos, dominaron en la semana noticiosa de Rusia.

Putin presentó el jueves último el informe al Parlamento, centrado en las líneas estratégicas de la política interna y exterior del país, una evaluación de la situación actual derivada de las sanciones impuestas por Occidente y el tenso entorno alrededor de Rusia, así como proyecciones para un futuro inmediato.

Ante representantes de todos los poderes del Estado, Putin exaltó el factor de unidad de la población rusa como premisa para afrontar los desafíos actuales, las dificultades y seguir adelante con los proyectos de desarrollo socio-económico.

Quiero agradecer a los rusos por el apoyo y la solidaridad en estos momentos decisivos cuando se decide el futuro del país, expresó el gobernante en los primeros minutos de su alocución, que se prolongó más de una hora y fue la oncena intervención para él desde que llegó a la presidencia en 2000.

Subrayó que Rusia es capaz de defender la verdad y la justicia y que estamos preparados, dijo, para vencer, al invocar la victoria del pueblo soviético sobre la Alemania fascista en 1945 y otros innumerables logros.

En cuanto a las sanciones, consideró esas medidas punitivas como un instrumento de contención de Occidente para frenar las posibilidades crecientes de Rusia, tras advertir que tal política fue usada más de una vez y siempre que se entiende que somos demasiado independientes, observó Putin.

Dejó en claro que su país no cederá a las presiones de Occidente para cambiar su postura sobre la situación en Ucrania y deploró la manipulación del derecho internacional en función de los intereses coyunturales de algunos estados.

Advirtió igualmente sobre las amenazas al equilibrio estratégico y el balance de fuerzas en el mundo tras la retirada unilateral de Estados Unidos, en 2002, del Tratado antimisiles y los intentos de imponer a Moscú una superioridad militar con una nueva carrera armamentista.

Entre los temas domésticos abordados, Putin prestó especial atención a la situación económica interna, signada por un estancamiento del crecimiento, peligros de recesión y la devaluación del rublo.

No obstante, aseguró el mandatario que continuarán con los programas sociales -salud, educación, demografía, capital materno- y prometió medidas de incentivo a las inversiones y más apertura a las iniciativas empresariales.

Anunció en ese sentido una amnistía a los capitales off shore -fugados al exterior- bajo la condición de que retornen a Rusia, en beneficio de la economía nacional.

Putin dedicó un segmento de su alocución anual al apoyo externo del separatismo, al terror y a las bandas armadas que operan en el Cáucaso ruso, con mención a los recientes acontecimientos en Grozni, capital de Chechenia.

Un comando terrorista de más de una decena de subversivos atacó en la madrugada del jueves un puesto de control vial y se parapetó en la Casa de la Prensa, sede de los periódicos republicanos, de los medios federales y páginas digitales.

Algunos armados se atrincheraron igualmente en una escuela contigua del centro de Grozni. Los órganos de seguridad determinaron que los autores planificaban una serie de atentados terroristas durante las celebraciones del Día de la Constitución, el 12 de diciembre.

Se conoció también el vínculo de la banda con la organización terrorista Emiratos del Cáucaso, de islamistas ultraradicales. Según el Ministerio de Interior, 14 policías murieron en la operación antiterrorista, además de una veintena de heridos.(PL)