Recomiendan a madres santacruceñas lactancia materna exclusiva hasta el sexto mes
De biológicamente compleja valora la medicina la leche materna, líquido que no es solo un nutriente, presenta muchos factores inmunológicos que permiten estimular la fortaleza del recién venido al mundo, el cual se considera deprimido por ser un organismo inmaduro, sobre todo si se trata de nacidos prematuramente.
A Danni Eduardo, según nos confesó su joven madre Leidi Acuña Almeida, “le gusta mi mama izquierda, la otra no la ha querido nunca, parece que la preferida le permite succionar cómodamente. El es prematuro y fue un bajo peso… aunque ya está hecho un trinquete. Como la leche de los pechos, en esta etapa, no hay otra mejor”.
La progenitora le aporta al bebé, a través del fluido, experiencia inmunológica evitándole al crío, en un inicio, las enfermedades respiratorias y las diarreicas. Se ha demostrado que la lactancia materna exclusiva hasta el sexto mes de vida y complementada hasta los dos años de edad o más, protege contra la aparición de la diabetes mellitus, la hipertensión arterial y la obesidad durante la adultez, explicó Isachi Hernández Vázquez, doctora del Programa Familiar en el Consultorio diez, de Santa Cruz del Sur.
“¿No se ha dado usted cuenta? ¡Es un tragón!”, llama la atención Daima Olazábal Castellanos al referirse a su tierno hijo. “Me gusta lactarlo cuando reclama, es casi todo el día, no se llena. Este alimento no es comparable con otro, quien no le suministre a los pequeñitos esta leche como se debe está violando lo indicado por los Pediatras y los Médicos de la Familia”.
La Hernández especialista en Medicina General Integral (MGI) puntualizó las Reglas de Oro para una Lactancia Materna exitosa. “Cuando el pequeño o la pequeña nacen la mamá deberá enseguida darle el pecho, amamantándolos a libre demanda, sin administrar agua ni otros alimentos hasta el sexto mes. La puérpera beberá más líquidos que de costumbre y mantendrá una adecuada alimentación”.
– ¿El calostro tiene grandes propiedades?
– “Por supuesto. Es rico en anticuerpos; garantiza muchas células blancas (leucocitos); es un purgante; contribuye a los factores de crecimiento; es rico en vitamina A; ayuda a prevenir la ictericia; ayuda a madurar el intestino, previene la alergia y la intolerancia, entre otros”.
Esta maternal acción favorece el vínculo afectivo de las progenitoras y los bebés, ayuda a retrasar un nuevo embarazo y protege la salud de la madre. (Raúl Reyes Rodríguez/ Colaborador de Radio Santa Cruz)
