23 Feria Internacional del Libro, regalo de Cuba a La Avellaneda

23 Feria Internacional del Libro, regalo de Cuba a La AvellanedaA 200 años de su natalicio, Gertrudis Gómez de Avellaneda continúa siendo la eterna romántica y la mujer que nunca perdió la lozanía. Por eso, para los camagüeyanos, sus coterráneos, es un orgullo que la 23 edición de la Feria Internacional del Libro esté dedicada a quien supo, desde su época, exaltar el papel social de la mujer.

De La Tula, nuestro José Martí dijo: “Su pesar era una roca” pues padeció y resistió el repudio de todo cuanto amó. Tenía demasiado talento para los gustos de una época en la que ni siquiera sus éxitos literarios, que la catapultaron entre las voces más altas del romanticismo, convencieron a los miembros de la Real Academia de la Lengua Española de aceptarla en su seno.

Es por ello que La Avellaneda, fuerte de espíritu y de expresión, ante tal decisión señaló: “La presunción es ridícula, no es patrimonio exclusivo de ningún sexo, lo es de la ignorancia y de la tontería, que aunque tiene nombres femeninos, no son por eso mujeres”.

En esta edición de la Feria Internacional del Libro tendremos de vuelta a La Peregrina, como también se le conoció, con varias de sus novelas, entre ellas Sab, Dos Mujeres y Guatimozin, el último emperador de México, solo por mencionar algunas.

También La Avellaneda escribió para el teatro magníficas obras como: La hija de las Flores, Baltasar, La verdad vence apariencias, Flavio Recaredo, Simpatía y Antipatía, y Oráculos de Talía, entre muchas otras; y ejerció el periodismo como directora, redactora y fundadora de la revista literaria femenina “Álbum Cubano de lo Bueno y lo Bello”.

Durante la Feria, además de la presentación de sus libros se realizarán eventos teóricos y debates sobre el amplio quehacer literario y teatral de quien bien se dice, fue de cuna camagüeyana, corazón cubano y estatura iberoamericana.

La poesía de La Avellaneda estremeció y estremece aún. Su emblemático poema “Al Partir”, escrito en 1836 al salir de Cuba rumbo a España, donde desarrolló casi toda su carrera literaria, pero donde también sufrió un amor no correspondido y la muerte de una hija y un esposo; es sin dudas su más sentida obra.

Recientemente, la casa donde nació Gertrudis el 23 de marzo de 1814, fue declarada Monumento Nacional, un regalo de los camagüeyanos a esta prolífera mujer de agudo verbo y prolífera creatividad literaria.

En tanto, la dedicatoria de la Feria Internacional del Libro, es un homenaje que trasciende las fronteras de la suave comarca de pastores y sombreros que la vio nacer, y se erige como un homenaje de toda Cuba y del mundo. Por Raysa Mestril Gutiérrez/ Radio Cadena Agramonte