Economía

Energía solar, opción para el futuro de Cuba

A comienzos de 2014 los parques fotovoltaicos de Cuba alcanzan una capacidad de generación de 10 megawatts pico, pero en opinión de Elena Vigil, Premio Nacional de Física 2013, esta debe aumentar, ya que el aprovechamiento de la luz solar será parte del futuro de la Isla.

La Profesora de Mérito de la Universidad de La Habana comentó en exclusiva a la Agencia de Información Nacional (AIN), que el país avanzado en el uso de los distintos tipos de la energía limpia, incluidos la hidráulica, eólica y la biomasa.
   
“Nuestra nación ha demostrado que no son necesarios grandes saltos de agua o fuertes vientos sostenidos; se pueden instalar mini generadores para abastecer a comunidades, pero si algún día queremos tener un Sistema Eléctrico  sin dependencia de los combustibles fósiles, la luz solar será la opción, pues no está localizada en un área concreta”, apuntó.
 
Vigil, miembro de la Junta Directiva de CUBASOLAR, sociedad cubana para la promoción de las fuentes renovables de energía y el respeto al medio ambiente, explicó a la AIN que a nivel mundial se producen más de 40 gigawatts pico en este tipo de energía, pues se ha vuelto una opción más atractiva debido a la disminución considerable de su precio en las últimas dos décadas.
   
“Se podría generar aún más, pero tiene en su contra que no es transportable de un lugar a otro como el petróleo o el gas, y por tanto no es comercializable, por eso las grandes empresas no tienen interés de invertir en ella”, abundó.
   
“De hecho, el financiamiento es el problema que también golpea a Cuba, porque aunque nuestro gobierno desea desarrollarla, el silicio, elemento principal de las celdas, es muy costoso”, señaló.
   
“Esa es la gran contradicción de trabajar con ese tipo de energía, pues fabricar dichas celdas implica un elevado gasto de petróleo, por eso tanto los 10 parques fotovoltaicos en funcionamiento, como los ocho en preparación, emplean componentes importados, aunque el exterior de los paneles sí son de producción nacional”, subrayó.
   
Vigil confía en que, progresivamente, el silicio sea sustituido por la más económica tecnología de capa fina y la capacidad de almacenamiento de sus baterías aumente, de modo de estar condiciones de costear su implementación.
   
“Esta no es rama de la investigación que pueda seguirse circunscribiendo al Instituto de Ciencia y Tecnología de Materiales y a la Facultad de Física de la Universidad de La Habana, resaltó, sino debe abarcar a otros centros y quizás abrirse a la inversión extranjera: debemos apostarle como en su momento se hizo por la biotecnología”.
   
Elena Vigil es miembro de mérito de la Academia de Ciencias de Cuba y de la Asociación Cubana de Física, disciplina a la cual ha dedicado más de cuatro décadas en su vertiente experimental.(AIN)