Cada 10 de octubre, renovado compromiso con la Patria

Cada 10 de octubre, renovado compromiso con la PatriaCada año, el 10 de octubre crece en el alma de los cubanos, cada 10 de octubre significa una nueva victoria para los hijos de esta tierra, por que en cada aniversario del inicio de la gesta independentista seguimos aquí, dispuestos a mantener cada ápice de la libertad por la que luchamos desde aquel día, cuando Carlos Manuel de Céspedes -junto a un grupo de ricos hacendados- decidió liberar a sus esclavos y lanzarse a los campos de esta Isla para romper el yugo opresor colonialista.

Una década de encarnizada lucha caracterizó aquel proceso, en el que se comenzó a forjar la nacionalidad cubana, un batallar en el que no solo se buscaba la soberanía de la mayor de las Antillas, sino que proclamaba la igualdad del hombre y desde sus inicios mostró su carácter latinoamericanista: dos aspectos plasmados en el Manifiesto del 10 de octubre, documento que daba a conocer al mundo las causas y la verdad de nuestra guerra.

Si bien la contienda no nos llevó al triunfo, sentó las bases para nuevas campañas, cada una aportando nuevas experiencias para la siguiente, en un proceso de más de cien años, que tuvo su clímax el 1ro de enero de 1959, cuando Cuba alcanzó su verdadera independencia.

Desde el propio triunfo, cada generación de cubanos ha protagonizado un nuevo combate, acrecentando en su espíritu redentor, la decisión de mantener a cualquier precio la libertad alcanzada, frente a un nuevo y más poderoso enemigo.

Las batallas de hoy no se libran en la manigua con machetes y arcabuces, ni en las guerrillas de la Sierra, hoy nuestras batallas son de ideas y nos enfrentamos a un nuevo armamento, tan o más potente que miles de cañones y fusiles: la Cíberguerra.

Después de 144 años, el combate se renueva, las actuales generaciones asisten a este 10 de octubre con el reto de mantener las conquistas heredadas de casi siglo y medio de lucha, y continuar un proceso que tiene en su centro el bienestar social, basado en la libertad y la igualdad del hombre.

La unidad y apoyo latinoamericano que plasmó Céspedes en su Manifiesto del 10 de octubre, renace hoy en la integración del continente, hecho que a pasos agigantados se consolida y que se evidencia en la reciente victoria de Chávez en Venezuela, que es la victoria de todos nuestro pueblos y nos fortalece frente a un vecino empeñado en mantener a la América Nuestra como su patio trasero.

Quienes hoy gozamos de las conquistas de la Revolución Socialista y heredamos una sociedad perfectible, pero siempre en pro de la justicia social, no podemos cerrar los ojos a nuestras tradiciones: es la hora -como en 1868, 1895 y 1953- de la marcha unida, para defender por siempre la verdadera independencia, conquistada hace más de medio siglo.

Por Airam Fernández Casas/ Radio Cadena Agramonte.