Avanza China en exploración de aguas profundas

Con el regreso a casa del buque Xiangyanghong 09, que transportó al sumergible chino Jiaolong, China marcó una nueva página en la exploración de aguas profundas, al romper ese último el récord nacional de inmersión con un descenso de siete mil 62 metros.

La hazaña, realizada en la Fosa de las Marianas, ubicada en el Pacífico occidental, capacita técnicamente a la nación asiática para explorar el 99,8 por ciento de los océanos del mundo.

Además supone un gran salto científico y tecnológico en ese campo, según reconoció Liu Feng, jefe del programa, al permitir al país realizar investigaciones y explorar los recursos en toda esa área del fondo marino mundial.

El Jiaolong retornó a su puerto de origen, en la ciudad de Qingdao, de la oriental provincia de Shandong, el pasado 16 de julio, tras una misión de seis semanas, en tanto la próxima está prevista para abril y mayo del próximo año en el Mar Meridional de China.

Allí llevará a cabo más estudios en las profundidades marinas relacionados con el medio cambiante y su influencia en el clima.

Luego se destinará a las zonas aprobadas por la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos para la investigación y la preparación a fin de llevar a cabo un proyecto minero, anunció Liu.

El Jiaolong completó su programa de inmersión de seis pruebas el 30 de junio al descender hasta los siete mil metros.

Con los buzos Ye Cong, Cui Weicheng y Yang Bo a bordo, el vehículo en sus anteriores cinco intentos bajó hasta los seis mil 671 metros, seis mil 965, seis mil 963, siete mil 20 y siete mil 62 metros los días 15, 19, 22, 24 y 27 del referido mes, respectivamente.

Al llegar a la máxima profundidad alcanzada se tomaron diferentes muestras: tres de agua, dos de sedimentos del fondo marino y la de un organismo, además se marcó el lugar y realizaron varios experimentos. El equipo atrajo a muchos seres vivos con cebos y captaron fotos y videos.

Durante las pruebas del pasado año el aparato bajó hasta los cinco mil 188 metros y en las de 2010 lo hizo hasta los tres mil 759 metros, todas con un trío de hombres a bordo.

En los últimos descensos los tripulantes estuvieron apoyados por cerca de 100 científicos a bordo del Xiangyanghong 09, buque construido en 1978 y encargado de transportar el sumergible al área prevista para las inmersiones, adonde llegó el día 11 de junio.

Los expertos mejoraron el sistema de presión hidráulica del Jiaolong para que pueda aguantar las altas presiones y las bajas temperaturas a esas profundidades. Además, el vehículo está equipado con GPS y su nave nodriza fue modernizada para su localización.

China se ha convertido en uno de los pocos países que producen sumergibles tripulados con fines científicos.

El proyecto del Jiaolong se inició en 2000, cuando los investigadores y especialistas chinos se reunieron para discutir la viabilidad de la tecnología de aguas profundas.

No cabe duda que estas expediciones beneficiarán a la humanidad, según se reconoce. Para Ye Cong, jefe del equipo a bordo del sumergible, los fondos marinos poseen recursos valiosos que están por descubrir, como el sulfuro hidrotérmico y los nódulos de manganeso.

Mientras, Liu Feng considera que el océano profundo, en muchos aspectos, es la clave para desentrañar los misterios de la vida en la Tierra.

China, por eso, no solo tiene este proyecto con esos objetivos. El pasado 28 de abril el buque de investigación Dayang Yihao inició la 26 expedición oceánica del país, al zarpar de la ciudad de Sanya, en la insular provincia de Hainan, para una misión de 370 días.

Tao Chunhui, al frente del grupo de expertos a bordo de la nave, dijo que las labores se centrarán en el estudio de sulfuros polimetálicos, bio-recursos y el medio ambiente.

Dayang Yihao, cuya ruta incluirá los océanos Índico y Atlántico, lleva avanzados instrumentos científicos, entre ellos un vehículo submarino operado de forma remota.

Su regreso, a la nororiental ciudad costera de Qingdao, está programado para el 2 de mayo de 2013. Asimismo, el barco de investigación más avanzado de China, Kexue (Ciencia), estará listo para realizar su primera expedición en el segundo semestre de este año, según se anunció el 8 de diciembre.

El buque, de cuatro mil 864 toneladas de peso, llevará a cabo sus primeros estudios y sondeos oceanográficos desde los márgenes continentales de China hasta el oeste del Pacífico, señaló a la prensa Sun Song, director del proyecto.

La misión se enfocará principalmente en la influencia de ese océano sobre el clima y el medio ambiente de las costas del país, la biodiversidad marina, el entorno de alta mar y la detección de organismos vivos.

De 99,6 metros de largo y 17,8 de ancho, el Kexue tiene autonomía para 15 mil millas náuticas y está dotado de los equipos y las tecnologías más avanzados del mundo en materia de navegación.

Con una velocidad máxima de 15 nudos, el navío tiene la capacidad de transportar a 80 tripulantes durante un máximo de 60 días.(PL)