Bloqueo contra Cuba, medio siglo de afectaciones en salud

Bloqueo contra Cuba, medio siglo de afectaciones en saludLa Habana, 3 feb. – Desde hace cinco décadas Cuba padece los efectos de un sostenido bloqueo por parte de Estados Unidos, que abarca todos los ámbitos de la vida, con la consiguiente afectación de los habitantes de la pequeña nación.

El 3 de febrero de 1962 el entonces presidente estadounidense, Jonh F. Kennedy, decretó la Proclama 3447, que amparó una política de sanciones contra la isla, mantenida por nueve administraciones y recrudecida durante los mandatos de George W. Bush, y Willian Clinton.

Durante dos décadas, la Asamblea de Naciones Unidas condenó el bloqueo y exigió su levantamiento. Las votaciones comenzaron el 24 noviembre de 1992, cuando la 47 sesión ordinaria de ese órgano aprobó por 59 votos a favor, tres en contra y 71 abstenciones la primera resolución en ese sentido.

Cada año se suman más países a la condena, y la votación de 2011 concluyó con 186 votos a favor, dos en contra y tres abstenciones del informe titulado " Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba".

Según cálculos moderados divulgados en el documento, las pérdidas económicas ocasionadas superan los 104 mil millones de dólares, cifra que rondaría los 975 mil millones si se considera la depreciación de esa divisa frente al oro en las últimas décadas.

El sistema de salud, uno de los más susceptibles, no sólo por sus efectos económicos, sino también por el sufrimiento que ocasiona a los pacientes y familiares, ha padecido recias restricciones en la adquisición de medicamentos y tecnologías médicas de procedencia norteamericana, así como el impedimento a obtener información de avanzada.

Aún cuando toda la red de hospitales y policlínicos ha padecido los efectos negativos de la injusta política, hay servicios más sensibles, como la cirugía cardiovascular, ortopedia, oncología y trasplante renal, al no lograr acceder a medios de diagnóstico, o fármacos de última generación producidos en Estados Unidos.

Ejemplo de ello es el departamento de Radioterapia del Instituto de Oncología y Radiobiología, que confrontan serias dificultades con la compra de piezas, accesorios y citostáticos novedosos, como la adriamicina liposomal y la nitrosoureas, específicas para tratar tumores encefálicos.

Asimismo se ve privado de contar con un citómetro de flujo para el estudio de células cancerosas, dado que la firma norteamericana Becton Dickinson al conocer que su destino era Cuba, le negó su venta a la Empresa intermediaria en la compra.

El Programa Nacional de Trasplante Renal para sus estudios de histocompatibilidad (HLA), sobre bases científicas y éticas, requiere de reactivos serológicos anti HLA de alta calidad, que durante años fueron adquiridos a la firma One Lamda, a través de terceros países.

El recrudecimiento del bloqueo ha incidido negativamente en la adquisición de dichos reactivos, lo que traerá como consecuencia la paralización del Programa o lo llevará a un plano científicamente inferior.

A lo largo del medio siglo de bloqueo se han visto entorpecidas otras acciones, tales como el desarrollo de proyectos científicos entre ambos países, al imponerse trabas al libre intercambio académico.

Sin embargo, pese a las dificultades que el país enfrenta, son conocidos los esfuerzos realizados para desarrollar y mantener novedosos programas de salud, y disponer de un sistema único, universal, gratuito, moderno y eficiente.

Muchos son los logros obtenidos, entre los que destacan, los índices de mortalidad infantil, de los más bajos del mundo, el aumento en la esperanza de vida de los cubanos, más de 20 enfermedades eliminadas o controladas a partir de que sus formas graves desaparecieron, así como del programa de vacunación imperante, el cual protege a los niños contra 13 afecciones.

Cuba cuenta hoy con el mayor número de especialistas de su historia, así como una elevada cifra de másteres y doctores en ciencias, comprometidos todos con la obra de la Revolución y con el pueblo, aseveró recientemente Roberto Morales Ojeda, titular de salud.

Resaltó que en la actualidad 146 mil alumnos cursan estudios en ciencias médicas (26 por ciento de toda la educación superior), 24 mil de ellos, procedentes de diversas naciones del orbe.(PL)