Vencer o morir

Vencer o morir Durante los primeros días de enero de 1957, Fidel decide llevar a cabo una acción militar exitosa contra el ejército de Batista, para así darle una prueba al pueblo y a la propia tiranía, que la guerrilla existía y tenía poder de victoria.

La zona de La Plata ofrecía las condiciones necesarias desde el punto de vista estratégico para realizar la acción, dada la existencia de un pequeño cuartel militar, que por su ubicación apartada, la poca población y la tradición de lucha sostenida en la Sierra Maestra en esos contornos contra los atropellos de los latifundistas dueños de esas tierras, hacían vislumbrar el triunfo.

El factor sorpresa sería determinante en la acción bélica, ya que ni campesinos ni los pocos soldados que radicaban en el lugar sospechaban la presencia del pequeño destacamento guerrillero. El éxito de la operación era factible para elevar el ánimo y la confianza en quienes nunca habían combatido.

Todavía eran un puñado de hombres escasamente armados, sin experiencia militar, y agotados por las largas marchas por las estribaciones de la Sierra Maestra, pero con la convicción de luchar por liberar la Patria del yugo del tirano de turno.

El Comandante en Jefe prepara la acción detalladamente, ordena a los grupos que participarán en el ataque las acciones que deben llevar a cabo, y en la madrugada del día 17 de 1957, se produce el primer combate del bisoño grupo guerrillero contra los soldados de la tiranía, con una total y rotunda victoria que pone de manifiesto la existencia y posibilidades reales del naciente Ejército Rebelde, combatientes que escribirían grandes y heroicas páginas a través de la lucha desarrollada hasta alcanzar la verdadera liberación de la Isla el Primero de Enero de 1959.

La victoria de La Plata demostró que la lucha podía ganarse, y demostró además al pueblo cubano que los combatientes del Granma no estaban aniquilados, que el Ejército Rebelde ya era una certeza y un faro de luz y esperanza para la nación cubana.

Cincuenta y cinco años se cumplieron de ese hecho histórico, donde un puñado de hombres hizo realidad su decisión de luchar por la libertad de la Patria, y de llevar adelante un proceso revolucionario que hoy se revitaliza y se consolida, haciendo valedero los principios y la voluntad de aquellos momentos, cuando la única certeza era vencer o morir. (Hugo Betancourt Mayoral/ Radio Santa Cruz)