Cuba continuó su ascenso panamericano en Winnipeg 67
Cuba hizo realidad el lema de "En Canadá más alto que en Brasil", al ubicarse en el cuarto lugar por países en los V Juegos Panamericanos de Winnipeg 67, con ocho medallas de oro, 14 de plata y 26 de bronce. Meritoria actuación pues, además de las 48 preseas alcanzadas, situó a otros 44 deportistas en cuarto y sexto peldaños, dejando atrás el quinto lugar de Sao Paulo 63, cuando logró cuatro preseas de oro, seis de plata y cuatro de bronce.
Una vez más Estados Unidos (120-63-42) dominó las acciones, seguido por Canadá (12-37-43) y Brasil (11-10-5), país este último que superó a la isla caribeña por mayor cantidad de títulos (11 por 8), aunque en total de lauros estuvo por debajo, con 26 frente a 48 los carbeños.
Muchas fueron las alegrías en la delegación cubana, en especial en el fuerte torneo de atletismo que concluyó con 26 nuevas marcas continentales y dos igualadas.
Nuevamente la velocista Miguelina Cobian sobresalió en las pistas, con el título en el relevo 4×100, con tiempo de
44,6 segundos, el metal plateado en los 100 metros (11,6) y el de bronce en los 200 (23,8).
La cuarteta triunfadora cubana estuvo integrada, en ese orden, por Marcia Garbey, Violeta Quesada, Cristina Hechavarría y Miguelina, y fue escoltada por las de Canadá (45,5) y Jamaica (47,1).
En el hectómetro la "saeta oriental" sólo fue superada por la estadounidense Barbara Farrell (11,5), mientras en los 200 metros quedó por debajo de Wyomia Tyus (eua-23,7) y de la propia Farrell (23,8).
El boxeo también tuvo un importante aporte al medallero cubano, con tres coronas, igual cantidad de metales de plata y una de bronce, validas para el primer lugar ante 89 púgiles de 16 naciones, entre ellas Estados Unidos, ocupante del segundo puesto (3-0-4).
Los máximos honores fueron para Enrique Regueiferos, en los 60 kilos, Rolando Garbey (71) y Andrés Molina (67), mientras que Fermín Espinosa (54), Francisco Oduardo (57) y José L. Cabrera (91), obtuvieron las preseas de plata, y Joaquín Delís (75) la de bronce.
Esgrima, gimnástica, judo, pesas, lucha, remo, tiro y voleibol también subieron al podio de premiaciones, en tanto el baloncesto y el polo acuático enseñaron credenciales para futuras ediciones.
Un hecho singular se produjo en el béisbol, pues Cuba terminó en el segundo lugar, al perder ante el sotanero Canadá, con marcador de nueve carreras por 10.
El campeón resultó Estados Unidos, que cayó dos veces frente a los cubanos (3-4 y 2-9), pero los organizadores decidieron una serie extra de tres partidos entre ambos equipos, finalizada a favor de los estadounidenses, con pizarras de 8-3, 5-7 y 2-1.
Cuba compitió en 16 de los 21 deportes convocados, con 217 deportistas, en tanto que Estados Unidos (406) y Canadá (363) lo hicieron en todas las disciplinas. (Por Carlos González Rego, AIN)
