EE.UU. no va hacia una nueva guerra en Medio Oriente, dice Obama

EE.UU. no va hacia una nueva guerra en Medio Oriente, dice Obama Washington, 18 sep .- El presidente estadounidense, Barack Obama, trató de apaciguar los ánimos al reiterar que no involucrará al país en una nueva guerra con su anunciada estrategia para combatir al grupo radical Estado Islámico (EI) en Iraq y Siria.

Obama se apareció en la sede del Comando Central este miércoles, un día después que el jefe del Estado Mayor, general Martin Dempsey, sugiriera ante una audiencia del Comité de Servicios Armados del Senado que están dentro de las posibilidades las misiones de los soldados en el terreno.

"Usaremos nuestra fuerza aérea. Entrenaremos y equiparemos a nuestros aliados", insistió el mandatario tras reunirse con el general Lloyd Austin, jefe del Comando Central, emplazado en el sureño estado de Florida.

Según Obama, el plan contra el EI saldrá adelante con una amplia coalición de aliados, pues subrayó -como ha dicho en ocasiones anteriores-, que Estados Unidos no puede lanzarse solo a esta lucha.

Obama expresó que "no habrá ningún refugio seguro para los terroristas que amenazan" a su país, una idea asociada a lo que dijo hace una semana en el mensaje a la nación cuando subrayó que a los yihadistas hay que atacarlos en cualquier lugar donde se encuentren.

Las palabras de Obama en MacDill Air Force Base se efectuaron previo a una votación clave en la Cámara de Representantes programada para este miércoles que autorizaría fondos para que el Pentágono entrene a los sublevados sirios.

El voto de hoy es muy específico. "No se debe confundir con ninguna autorización para ir más allá", precisó la líder de la minoría en la Cámara baja, Nancy Pelosi.

La representante demócrata por California enfatizó que su voto no sería a favor de las tropas para ir al terreno, sino para autorizar el apoyo a la llamada oposición moderada siria.

Obama acotó también en el propio mensaje del miércoles último que para acabar con el EI ampliaría los bombardeos contra posiciones en suelo sirio, además pidió fondos para armar y entrenar a la "oposición moderada" que trata de defenestrar al presidente Bashar Al Assad.

El secretario de Defensa, Charles Hagel, dijo ayer que más de 40 naciones han expresado su voluntad de participar en una campaña internacional contra el EI y más de 30 están dispuestas a ofrecer apoyo militar.

Hagel comentó que aliados clave como Reino Unido, Francia y Australia ya han contribuido, y que otros países establecerán sus compromisos en la Asamblea General de la ONU la próxima semana.

Un artículo del diario The New York Times cuestionó a esa supuesta oposición moderada de la que se habla ahora y alertó que con su actitud Estados Unidos y occidente deambulan en un nuevo conflicto bélico en el Medio Oriente. Las autoridades de Damasco enfatizan que cualquier ataque a su territorio en nombre de la lucha antiterrorista será considerada una agresión. (PL)