Día Mundial del Donante de Sangre, por productos sanguíneos seguros
Los pacientes con trastornos hematológicos y de médula ósea o perturbaciones hereditarias de hemoglobina e inmunodeficiencia también requieren de sangre segura, además de las víctimas de un traumatismo, emergencias, desastres y accidentes, al igual que las personas que se someten a intervenciones médicas y quirúrgicas avanzadas.
La OMS señala que aunque el suministro de sangre es una necesidad universal, existen diferencias marcadas en cuanto al nivel de acceso entre los distintos países y dentro de los mismos.
En muchas naciones hay problemas para ofrecer productos sanguíneos suficientes y garantizar su calidad.
De acuerdo con un informe de la organización de las Naciones Unidas, el 42 por ciento de los 117,4 millones de unidades de sangre que se extraen en el mundo son donados en los países de altos ingresos, donde vive el 16 por ciento de la población del planeta.
Las estadísticas muestran que en los países de ingresos bajos, el 52 por ciento de las transfusiones se realizan a los niños menores de cinco años, mientras que en los de altos ingresos los pacientes más transfundidos son los mayores de 65 años.
La OMS recomienda que toda la sangre donada sea analizada para la detección de infecciones antes de su uso.
El 14 de junio de cada año se celebra el Día Mundial del Donante de Sangre, fecha elegida por la OMS como muestra de reconocimiento y agradecimiento a los donantes voluntarios no remunerados por un regalo que permite salvar vidas.