Cuba busca diseñar un plan económico más flexible y participativo
A propósito de su intervención en la Asamblea General de Asociados de la Cámara de Comercio de Cuba celebrada en esta capital, Gil remarcó que, para esta etapa, se precisa del diseño de metas que se establezcan desde las estructuras productivas y sin que los límites fijados por el nivel superior supongan una camisa de fuerza para estas entidades.
Se trata de que las empresas puedan poner encima de la mesa todas sus potencialidades, buscando lo que el país necesita más, que es incrementar las exportaciones, dijo.
Si la empresa necesita hacer inversiones para dar valor agregado a las exportaciones es necesario proponerlas, opinó igualmente.
De acuerdo con el ministro, lo que carece de sentido es que el plan coarte la iniciativa exportadora de las entidades productoras o que una directiva establezca un límite que no permita la expansión para dotar al producto de valor agregado.
Entonces, con esa valoración del sector empresarial, haremos los análisis económicos para ver cómo se distribuyen los financiamientos y los recursos de los que la economía dispone, pero la confección del plan debe ser un proceso de abajo hacia arriba y no viceversa, reiteró.
En referencia al contexto cubano, signado por una intensificación del bloqueo que Estados Unidos mantiene contra Cuba, Gil estimó que en la Isla existen posibilidades reales que la dotan, no solamente para adoptar una postura de defensa y resistencia ante las presiones, sino incluso que le permitan el desarrollo y el crecimiento.
Con el recrudecimiento del bloqueo vamos a defendernos y a resistir y, además, vamos a desarrollarnos y a crecer; y creemos que tenemos potencialidades para ello, sostuvo.
El ministro reveló que a partir del próximo 22 de abril se iniciará la confección del plan económico para 2020 de conjunto con las entidades productoras del país.
Asimismo, otro de los propósitos perseguidos para el año venidero en los dictados de la política económica es el de potenciar a la industria nacional al dotarla de prioridad en la asignación de los recursos.
La Cámara de Comercio de Cuba posee hoy 800 entidades afiliadas y en su Asamblea General efectuada durante esta jornada participó, además, el ministro de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca.