Elogian estrategia de Cuba para enfrentar la desertificación y la sequía
La Habana, 14 may.- La estrategia de Cuba para enfrentar la sequía y la desertificación fue elogiada por el representante de la oficina del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) en América Latina y el Caribe, Robert Erath.
En esa esfera, el plan de acción nacional de Cuba es un ejemplo para toda la región y en general para el mundo, dijo Erath a Prensa Latina en La Habana, durante un taller para iniciar en el país caribeño un proyecto para el manejo de recursos hídricos con financiamiento del gobierno cubano y del Fondo Mundial para el Medio Ambiente.
"El hecho de haber diseñado en base a ese plan un programa de asociación de país es algo ejemplar para toda la región y el mundo, comentó el representante de la oficina regional del Pnuma.
"Son muy pocas las naciones que han logrado esto, y es una actividad ejemplar consecuente con el manejo racional de los recursos naturales, y se están obteniendo unos logros importantes, no solo para el desarrollo sostenible en lo social, económico y ambiental para Cuba, sino que también servirá de ejemplo para otros países", agregó.
Especialistas cubanos diseñaron un grupo de cinco proyectos enfocados en el manejo sostenible de los ecosistemas y los recursos naturales como los suelos, el agua y los bosques, en apoyo al programa nacional de lucha contra la desertificación y la sequía.
El Programa de Asociación de País sobre Manejo Sostenible de Tierras, que se implementa en Cuba desde 2008, busca reducir la degradación de los suelos a fin de alcanzar un desarrollo sostenible y el incremento de la seguridad alimentaria.
El ingeniero Delbby García, director del programa, señaló que las principales áreas de intervención en el proyecto de manejo integral de los recursos hídricos están en la llanura sur de la provincia de Pinar del Río, la costa sureña de Guantánamo, la llanura Habana-Matanzas y la Cuenca del río Cauto, sitios con importantes problemas de degradación de suelos y ecosistemas.
Esa última región, situada en el oriente de Cuba, presenta uno de los ecosistemas más importantes del país, declaró el ingeniero agrónomo Félix González, especialista de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente en ese territorio.
La zona presenta un clima variable y semicontinental, de elevadas temperaturas y evaporación, tiene una alta incidencia en los cultivos agrícolas de esa región, que comprenden un 40 por ciento de la siembra de arroz nacional y altas producciones de caña de azúcar, así como cultivos varios y ganadería, señaló el experto.
A su vez, la llanura Habana-Matanzas es una región situada en la costa suroccidental del país altamente agrícola y productora de granos, viandas y hortaliza, una zona baja amenazada por la intrusión salina en sus aguas.
