Asumir nuestras responsabilidades

La Habana, 13 jul.- Transcurridos 79 días de que la Organización Mundial de la Salud declarara la emergencia mundial ante la aparición de un brote en México de gripe denominada inicialmente "porcina", el virus de la influenza A H1N1 se había extendido hasta el pasado sábado a 142 países, y según los últimos estimados han enfermado más de 114 000 personas, con un saldo de 565 fallecidos.

La región de las Américas, la más afectada del planeta, muestra la cifra de 77 674 casos confirmados con 513 muertes, y se destacan con el mayor número Estados Unidos, 37 212 y 211 fallecidos; México, 11 699/121; Canadá, 9 717/39; Chile, 9 549/25; y Argentina, 2 677/82.

Según informe del Ministerio de Salud Pública, nuestro país reporta en el mismo periodo 144 casos confirmados (93 adultos y 51 niños), de los cuales 84 llegaron a Cuba con la gripe: 40 extranjeros, 34 cubanos residentes en el exterior y 10 cubanos que regresaron de una estancia en diversos países. Otros 36 casos fueron introducidos: son cubanos infectados por enfermos procedentes del exterior.

Hasta el momento solo 24 son autóctonos, es decir, contagiados en su mayoría a partir de casos introducidos. Del total de los 144, recibieron alta médica 112, sin registrarse fallecidos.

Desde los primeros momentos, y ante el avance epidémico del nuevo virus —de alta capacidad de transmisión de persona a persona—, fue activado nuestro Sistema de Defensa Civil, integrado por todas las fuerzas y recursos de la sociedad y del Estado, y se adoptaron medidas dirigidas al reforzamiento de la vigilancia y control sanitario internacional en aeropuertos, puertos y marinas.

La instalación de 16 sensores de temperatura corporal en todos los aeropuertos internacionales, útiles para el diagnóstico preventivo de los viajeros que presenten fiebre a su llegada, han pesquisado a 266 501 personas, con la detección de más de 150 casos sospechosos, de los cuales 10 fueron confirmados.

De forma sistemática se ha venido realizando la búsqueda clínico-epidemiológica activa de los viajeros y sus contactos directos que presenten síntomas y se adoptan las medidas correspondientes.

Igualmente se incrementaron las capacidades para los estudios virológicos en el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK), lo que ha permitido estudiar más de 3 000 sospechosos de portar la enfermedad.

De destacado puede calificarse el esfuerzo que realiza Cuba, primero para prevenir la entrada del nuevo virus al país, diagnosticarlo precozmente y evitar los contagios; y cuando se ha originado algún caso establecer el rápido aislamiento para impedir en lo posible su extensión.

Son cuantiosos los recursos destinados por el Gobierno revolucionario, a pesar de los efectos de la actual crisis económica internacional, a la adquisición de antivirales específicos para el tratamiento del A H1N1 (en dosis para niños y adultos) y otros fármacos para la preservación y cuidado de nuestro pueblo, que tiene acceso gratuito a la asistencia médica.

Es importante subrayar que estas fortalezas de nuestro sistema de salud, dotado de un personal médico y paramédico altamente calificado, no bastan por sí solas para "detener" esta pandemia de gripe.

La capacidad de evitar su generalización descansa, sobre todo, en el rigor con que cada ciudadano asuma sus responsabilidades como defensor y practicante de la higiene personal y colectiva.

(Tomado de Granma)