Así defendemos en Cuba los Derechos Humanos
He leído en la página digital de las Naciones Unidas que este año ha sido sin paralelos para los derechos humanos, que, y cito : “El activismo en derechos humanos nunca ha sido más actual o más vital, y a través del poder transformador de los medios de comunicación social, personas corrientes se han convertido en activistas de derechos humanos”, y es posible que no les falte razón, porque hay mucha gente en el mundo que lucha porque se respeten los derechos de los seres humanos a gran escala, su integridad, su participación en la sociedad, en la política, en la vida y por la propia vida del hombre.
Pero también hay que dar una mirada retrospectiva y ver como se han violado -y aún violan- los derechos humanos en territorios como Palestina, o en países como Irak, Afganistán, Libia, Chile, Grecia y hasta en los propios Estados Unidos.
¿Cuántos han muerto por causa de las agresiones militares de la OTAN?
¿Cuántos han muerto por causa de las agresiones militares de los Estados Unidos y sus aliados?
¿Cuántos estudiantes chilenos en su lucha por mejoras educacionales han sido golpeados y detenidos por la policía?
¿Cuántos ciudadanos norteamericanos del movimiento pacífico de Indignados han sido agredidos con gas pimienta o detenidos?
En el aniversario 63 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, proclamada en 1948, celebrado ayer, una flotilla de grupos extremistas radicados en Miami, navegó hacia las costas cubanas, a tratar de fomentar disturbios en la población cubana y perturbar la tranquilidad de la población en la isla. Todo ello autorizado por el presidente norteamericano, Barack Obama, Premio Nobel de la Paz.
¿Podemos hablar con optimismo a nivel mundial de activismo frente a esas flagrantes agresiones a Cuba y sus ciudadanos, en el Día internacional de los Derechos Humanos?
¿El señor Obama, pretende así defender su Premio, con actos que denigran el noble propósito del científico creador de tal distinción?
Contra trincheras de piedras tendremos trincheras de ideas, parafraseando a nuestro apóstol José Martí, en el quehacer diario para educar más y mejor a nuestros hijos, para llevar adelante la economía nacional, para elegir el mejor representante a los órganos del Poder Popular, para desarrollar las disciplinas deportivas, para tener acceso a la salud, para integrarse al nuevo proyecto social, económico y político que se lleva a cabo en la nación, para llevar la ayuda necesaria a otros países en diferentes esferas de la vida.
Así defendemos los cubanos de Cuba los Derechos Humanos, cubanos todos, campesinos, constructores, pescadores, intelectuales, hombres y mujeres, a ejercer el derecho del voto, de opinión, de la vivienda, de la salud, de la alimentación, de educación, del cuidado a la vejez, sin tantas pompas ni cacareos, ni carros de ultimo modelo, sencillamente palpándolos a diario, en las acciones cotidianas de la vida.
Se cumplieron ayer 63 años de la Declaración Universal de Derechos Humanos, y aún en lo convulso y nefasto que se cierne sobre la humanidad, hay que tener fe en lo mejor del hombre, y luchar por la materialización de la idea expresada por el Apóstol cubano en su excelso discurso del 26 de noviembre de 1891 en Tampa: “Con todos y para el bien de todos”. (Hugo Betancourt Mayoral/ Radio Santa Cruz)