Repudia Cuba en Ginebra ataque israelí a Flotilla Libertad

Repudia Cuba en Ginebra ataque israelí a Flotilla LibertadGinebra, 3 jun. -Cuba repudió en los más duros términos el ataque israelí contra una flotilla denominada Libertad, que transportaba ayuda humanitaria a la Franja de Gaza con 700 civiles en misión pacífica y sin armamentos.

El embajador cubano en Ginebra, Rodolfo Reyes, dijo que el inicio de la 14 sesión del Consejo de Derechos Humanos (CDH) de la ONU arrancó en esta ciudad con "la terrible noticia de una nueva matanza indiscriminada cometida por el ejército de Israel".

Reyes recalcó que se trata de una total violación del derecho internacional, incluido el derecho internacional humanitario y los derechos humanos.

"Esta vez, el blanco de la poderosa maquinaria militar israelí – financiada y equipada con el apoyo directo de Estados Unidos y otras potencias occidentales -fue la llamada "Flotilla de la Libertad", apuntó.

El ataque de la marina de Tel Aviv el pasado lunes ocasionó la muerte a por lo menos nueve personas e hirió a más de 30, según recientes informaciones al respecto.

En otra parte de su intervención, el diplomático señaló la gravedad del hecho ocurrido en aguas internacionales.

El único pecado de la expedición era llevar unas 10 mil toneladas de ayuda, que incluía equipos médicos, alimentos, materiales de construcción y productos de necesidad básica, para aliviar la dramática situación de la población en Gaza, anotó.

"Se debe encauzar una investigación internacional independiente que identifique a los responsables y los haga comparecer ante la justicia. Las víctimas y sus familiares deben recibir la necesaria reparación", apostilló.

Reyes subrayó que la Potencia Ocupante (Israel) debe poner fin a su política de asfixia económica y destrucción contra la Franja de Gaza. (PL)

"Debe levantar el bloqueo, permitir la llegada de la ayuda humanitaria, y renunciar a sus políticas genocidas contra la población Palestina (…)".

Cuba reafirma su inequívoco apoyo a la causa palestina en su noble y legítima aspiración al establecimiento de un Estado libre, independiente y soberano, sobre la base de las fronteras establecidas en 1967, y con Jerusalén Oriental como su capital, concluyó.