Miami: critican retirada de valla publicitaria por Los Cinco

La Habana, 12 abr. – Andrés Gómez, director de la revista Areito Digital, calificó hoy de acto de salvajismo e intolerancia la retirada de una valla que exigía la absolución de cinco antiterroristas cubanos, colocada recientemente en una céntrica calle de Miami.

El periodista y activista político se refirió a la remoción del letrero -situado por iniciativa de la Alianza Martiana y Radio Miami-, luego de que grupos de la extrema derecha anticubana amenazaron a la compañía dueña del espacio publicitario de la instalación en la Avenida 17 y la Primera Calle del Southwest, señala la agencia Prensa Latina.
  
La valla -en el corazón de la llamada Pequeña Habana- pedía la total liberación de René González, Ramón Labañino, Antonio Guerrero, Fernando González y Gerardo Hernández, arrestados en 1998 en Miami y condenados en 2001, a penas que oscilan desde 15 años de cárcel hasta doble cadena perpetua más 15 años, por combatir el terrorismo.
  
¿Hasta cuándo una ínfima minoría podrá dictar e imponer de porque sí, amenazando con la violencia, sus absurdos criterios a toda una comunidad de más de dos millones de personas?, preguntó el director de www.areitodigital.net.
  
Mientras eso no pase, nosotros los que nos oponemos a las ideas, los métodos y los objetivos de los terroristas y sus aliados en la política y en la prensa, seguiremos laborando bajo estas terribles circunstancias, como lo hemos hecho los últimos 35 años, enfatizó el editorialista cubano residente en la Florida.
  
Esta actividad de propaganda constituyó la segunda proclama pública de tal índole patrocinada por Radio Miami y la Alianza Martiana, que antes publicaron anuncios por la libertad de los Cinco Héroes en los diarios El Nuevo Herald y The Miami Herald, recordó ese Comité norteamericano.
  
Comentó que las fuerzas anticubanas estaban entretenidas, al involucrarse en un inaudito ejercicio de intolerancia y vituperio en contra de Oswaldo Guillén, mánager de los Marlins, el equipo de béisbol de Miami, quien formuló declaraciones a la revista Time, en las cuales afirmó amar y respetar a Fidel Castro, líder histórico de la Revolución Cubana.
  
Guillén tuvo que moralmente arrodillarse y arrastrarse ante esa gente para poder conservar su puesto como mánager y su contrato de cuatro años por 10 millones de dólares.
  
Lo suspendieron por cinco juegos y los 100 mil dólares que hubiera ganado fueron donados a las organizaciones de la extrema derecha cubano-americanas que exigen su despido.(AIN)