Instructores de Arte transmiten valores éticos en planteles santacruceños



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Santa Cruz del Sur, 21 oct .- Propiciar mayor cultura para mantener en alto su efecto e indispensable existencia como espada y escudo de la nación Martiana y Fidelista, permite seguir preservando nuestras autóctonas costumbres y tradiciones desde las escuelas primarias de Santa Cruz del Sur donde laboran jóvenes instructores de arte.

Ellos, al igual que los educadores, enseñan a los estudiantes a ser buenos seres sociales: proporcionándoles calidad de vida en las conductas personales y colectivas, el cumplimiento de los deberes escolares, respeto mutuo, sentimientos patrios y el apego amoroso a la familia como elemento primordial en la sociedad, entre otros.

Los instructores de arte en cualquier plantel donde se encuentren ubicados, contribuyen a convertirlo en el centro cultural más importante de la comunidad. “Con nuestro sistema de actividades llegamos a las almas puras de los niños, adolescentes y jóvenes. Cada maestro es necesario para consolidar ese objetivo”, definió Orisel Martínez García, instructora de artes plásticas.

Un grupo de pioneros realizó algunos dibujos donde sobresalió el adecuado uso de los colores. La creatividad se desplegó en gran manera. Al finalizar su labor, Lorena Fuentes Rodríguez puso frente a la vista del reportero la enseña nacional muy embellecida.

“Cuando la profe Orisel nos orienta dibujar algo en específico o si es un tema libre siento alegría al reflejar en mis obras la patria, la independencia y el amor que sentimos los cubanos por las conquistas socialistas”, aseveró.
El desarrollo de talleres de creación permite apreciar el desenvolvimiento de los educandos en cualquiera de las manifestaciones artísticas, lo que facilita organizar los grupos de aficionados para la labor promocional de la cultura en los colegios.

Cuando Yoandri Suárez Romero canta una canción infantil “es como si mis padres o la maestra Gretchen me dieran muchos besos en la mejilla. El corazón me hace pun, pun de tanta felicidad. Formo parte de un coro con otros compañeritos de estudios. Participamos en los matutinos de la escuela”.

Los expresivos ojos negros, de la instructora de música Gretchen Figueredo Ramos, brillan de alegría. “Escuchar al niño decir esas cosas nos incentiva a fortalecer todavía más esta obra. Los pequeños son el porvenir. A ellos consagramos el deber que nos deleita”.

El diagnóstico exhaustivo a través de los juegos lúdicos permite a la instructora de teatro Mabel Fonseca Milanés descubrir las capacidades histriónicas de sus alumnos. “Para eso tenemos creados los talleres de apreciación y creación, desde los cuales visualizamos las actitudes de cada pequeñito en cada rol escénico que se le orienta. Tienen las edades maravillosas para enseñarles lo mejor del arte, porque para eso somos profesionales de la cultura”.

Vocación aderezada de talento llevan en las voces, hombros y manos estas jóvenes integrantes de la Brigada “José Martí” en el sur camagüeyano. Magnos mensajes ellas transmiten día a día a sus bisoños aficionados para impedir el nacimiento de modelos negativos en el arraigo cubano.