Fidel sigue convocando desde Camagüey, por el futuro de Cuba
Cuando el 4 de enero de 1959 Fidel hizo su entrada triunfante en Camagüey, al frente de la Caravana de la Libertad, Cuba comenzaba una nueva era, de verdadera y definitiva independencia.
En esa misma jornada, el joven Comandante en Jefe del Ejército Rebelde, en trascendental discurso en la Plaza de la Libertad de la capital camagüeyana, alertaba que entraríamos en una etapa aún más difícil que la lucha armada, con todo su heroísmo y entrega de vidas.
Algunos pensaban que Fidel exageraba, pues lo vivido en el país desde la clarinada del Moncada, pasando por la lucha en la Sierra y el Llano, resultaba, sin lugar a dudas, colofón glorioso de la gesta libertaria cubana.
Pero el enemigo de los pueblos acechaba y no podía permitir que un pequeño país, y por demás Cuba, considerado su “traspatio”, pudiera erguirse soberanamente, convirtiéndose en ejemplo no deseado para los intereses yanquis.
Y ahí estaba la razón de la alerta de Fidel, de que se entraría en un etapa muy difícil, pues a ello se agregarían las ya pensadas medidas populares dirigidas a materializar el Programa del Moncada, para la completa dignificación popular.
Tales premisas han alentado a la Revolución y su Partido de vanguardia en estos 61 años, transitando por un camino de acechanzas, agresiones y guerra no declarada, incluida la agresión bacteriológica, con un nada despreciable saldo de vidas humanas y afectados.
¡Cuánta razón la de Fidel…! Difícil, pero qué lleno de heroísmo el camino en estos más de seis decenios de Revolución cubana.
Cierto que ha sido abrupto el sendero, pero su solidez de pueblo, de inmensa mayoría de pueblo revolucionario, lo ha hecho indestructible para fuerzas enemigas de afuera y mercenarios de adentro.
Nos han tirado a matar, pero el blindaje moral de la nación cubana ha hecho errar el tiro al más aberrado y fascista mandatario yanqui, de los 12 que infructuosamente han pretendido destruir el proyecto social cubano que edifica la inmensa mayoría del pueblo de la Isla.
Y aquí estamos, celebrando la llegada triunfal de Fidel a nuestro Camagüey, un día como hoy, hace 61 años, escoltado por un pueblo en Revolución que hizo segura la Caravana de la Libertad y la proveyó de solidez para lo por hacer.
Así nos reunimos cada año los camagüeyanos en la plaza de La Libertad, para ratificar nuestra incondicionalidad a la Revolución cubana y la decisión de ser fieles a ella; aquí estamos nuevamente, como cada año, para que la triunfante caravana de todo un pueblo liderado por Fidel siga haciendo Revolución y más Socialismo de Patria o Muerte, seguros de que siempre venceremos.
Por Pedro Paneque Ruiz/Radio Cadena Agramonte.
(Foto: Archivo)