Tilda Ecuador de rumor infundado informaciones sobre Julian Assange (+Foto)
‘Rumores de la ‘inminente’ salida de Assange vienen desde meses atrás. El Gobierno no hará comentarios sobre los actuales rumores infundados, que además son insultantes. El Ecuador toma sus decisiones de manera soberana e independiente de otros países’, aseveró en la red social en una primera reacción.
Asimismo, recalcó que el asilo diplomático es una facultad soberana de un estado, con derecho a otorgarlo o retirarlo, unilateralmente, cuando lo considere justificado.
Los mensajes de Valencia fueron publicados a raíz de numerosos comentarios y pedidos desde medios de prensa, de un pronunciamiento sobre informaciones difundidas en el portal WikiLeaks, fundado por Assange, que da cuenta de la ‘inminente’ salida del australiano, de la sede diplomática, en cuestión de horas o días.
En su nota, el portal web, reconocido mundialmente por filtrar miles de documentos clasificados de Estados Unidos y otros estados, advierte que la detención del ciberactivista ya se coordinó con autoridades británicas y cita a una fuente de alto nivel dentro del estado ecuatoriano.
Mientras en Quito, los medios están pendientes de cualquier otra reacción, en Londres, frente a la legación diplomática de Ecuador, hay un despliegue periodístico, en espera de lo que pueda ocurrir con respecto a Assange.
La situación del australiano, quien desde agosto último debe seguir un Protocolo Especial para visitas y uso de servicios, entre otras limitaciones descritas como aislamiento por sus abogados, se complicó con la difusión de documentos que vinculan al presidente de esta nación andina, Lenín Moreno, con la empresa offshore de su hermano Edwin, INA Investments.
Tras una denuncia por la supuesta adquisición, desde esa compañía y a favor de Moreno, de productos costosos y un supuesto apartamento en España, la Fiscalía General decidió abrir una investigación.
Para muchos, eso y la reciente divulgación de unas fotos familiares del jefe de estado, constituyen los pretextos para concretar la expulsión de Assange, a quien el dignatario considera como ‘un problema heredado del gobierno anterior’, cuya situación de asilo se debe resolver más temprano que tarde.
El australiano y su equipo legal temen que al perder el asilo, las autoridades británicas lo trasladen a Estados Unidos, donde podrían procesarlo por los miles de cables filtrados en WikiLeaks sobre procederes secretos e irregulares del gobierno de la nación norteña, y su vida correría peligro.
