Presidente de Cuba concluye visita oficial a Irlanda

Dublin, 22 oct.- El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, concluyó hoy una visita oficial de dos días a Irlanda, con cuyas máximas autoridades coincidió en la necesidad de impulsar las relaciones bilaterales establecidas 20 años atrás.

 

En las 48 horas transcurridas desde su llegada a esta capital el domingo pasado, Díaz-Canel cumplió un apretado programa, que incluyó recorridos por lugares emblemáticos de la historia y la cultura irlandesas, y mantuvo sendas conversaciones con su anfitrión, el mandatario Michael Higgins, y el primer ministro, Leo Varadkar.

En ambos encuentros, las partes constataron el buen momento por el que atraviesan los vínculos diplomáticos establecidos el 27 de octubre de 1999, y acordaron trabajar en su fortalecimiento, sobre todo a partir de la mutua admiración que existe por la historia común de lucha independentista que comparten ambas islas.

Aunque el intercambio económico con Irlanda es escaso y se circunscribe a la esfera científica, se habló de ampliarlo a la agricultura, las fuentes renovables de energía, la biotecnología, educación, cultura, deporte y turismo, aseguró el mandatario cubano.

En el plano político, el visitante agradeció a sus anfitriones la posición de Irlanda a favor de la resolución contra el bloqueo estadounidense a la isla caribeña que cada año presenta Cuba ante la Asamblea General de Naciones Unidas.

Díaz-Canel, primer presidente cubano en realizar una visita oficial a este país europeo, cerró sus actividades en suelo irlandés con sendos encuentros con sus compatriotas residentes aquí, y con miembros del movimiento de solidaridad con la isla caribeña.

A los cubanos los actualizó sobre las medidas que está tomando su gobierno para enfrentar la compleja situación económica provocada por el recrudecimiento de la hostilidad de Estados Unidos, y los exhortó a sumarse desde aquí a la defensa de la nación.

La Patria somos todos, y hay que seguir defendiéndola, le aseguró el mandatario a sus compatriotas reunidos en uno de los salones del hotel Clayton, donde se hospedó durante su estancia en esta capital.

Tras el fraternal intercambio con los cubanos, Díaz-Canel compartió en un salón contiguo con irlandeses amigos de Cuba, a quienes agradeció por el apoyo brindado a lo largo de todos estos años, y por compartir, dijo, nuestras esperanzas, sueños y convicciones.

Durante su estancia en Dublin, el presidente cubano recorrió sitios de interés histórico y cultural, entre ellos, el parque St. Stephen´s Green, la antigua cárcel Kilmainham, símbolo del nacionalismo militante y constitucional de Irlanda, la biblioteca del Trinity College y la Catedral de San Patricio.

Al firmar el libro de visitantes en esos dos últimos lugares, Díaz-Canel dejó plasmado de su puño y letra la convicción de que Cuba e Irlanda, además de su insularidad, comparten vínculos patrióticos e independentistas.

Nuestros pueblos se distinguen por su patriotismo y ansias de independencia, escribió el jefe de Estado en la iglesia del santo patrono de los irlandeses.

La visita a Irlanda del presidente cubano forma parte de una gira europea que lo llevará este martes a Belarús, y luego a Azerbaiyán y Rusia, y responde a una similar que hizo Higgins a La Habana en febrero de 2017, donde fue recibido por el entonces mandatario, Raúl Castro.

La delegación oficial cubana está integrada por el canciller Bruno Rodríguez, el ministro de Comercio Exterior, Rodrigo Malmierca, y la directora del departamento de Europa en el ministerio de Relaciones Exteriores, Alba Soto. (Prensa Latina)