Pionera santacruceña investiga sobre las estrellas de mar

Santa Cruz del Sur, 24 jul.- Cuando esa vez correteaba por el litoral costero sus pies tropezaron con algo frágil, la curiosidad la obligó a detenerse, se agachó para buscar… El agua salada tan clara como un espejo le mostró lo que la había hecho retroceder: una estrella de mar.

“Fue el verano pasado; nunca antes la había tocado. Vi un programa por la televisión que habla de ese especial animal encargado de engalanar, también, los alrededores de nuestra playas”.

Dailena Liuris Álvarez Rosabal le comentó a sus padres el hallazgo. “Se contentaron con el comentario, pero quisieron saber si la había dejado en su hábitat natural, les respondí que sí, de lo contrario moriría. Mamá me exhortó a investigar sobre ese equinodermo para presentar el trabajo en el concurso municipal de Medio Ambiente”.

La pionera, alumna de quinto grado de la escuela primaria “Carlos Manuel de Céspedes”, reflexionó sobre la sugerencia. “La tomé tan en serio que empecé a buscar textos en la biblioteca local y a realizar indagaciones en internet que hicieran referencia a ese ser del entorno marino”.

Cuando tuvo todas las notas imprescindibles las desarrolló en siete cuartillas, mostrándole luego lo realizado a las que serían sus tutoras Tamara Arias Castillo y Yeilena Rosabal Morejón, además a su familia, los maestros y compañeritos del plantel donde estudia. “Los vecinos del barrio donde vivo quisieron que les explicara todo, les encantó”.

La labor investigativa titulada Una belleza del fondo del mar, exhorta a todas las personas a tomar conciencia hacia el cuidado y la protección de esa criatura de cuerpo aplanado formado por un disco pentagonal de cinco brazos o más.

“Se conocen dos mil especies de estrellas, a pesar de sus lentos movimientos son voraces, se alimentan de esponjas, anémonas, pólipos de coral, erizos de mar, caracoles, entre otros. Ehorto a cuidarlas para que no desaparezcan. Es mejor verlas embelleciendo el mar y no disecadas sobre muebles hogareños”

Dailena llevó lo realizado a los eventos municipal y provincial. En esa última cita fue elegida para asistir a la XXl Jornada Científica Infantil del Concurso Eduambiente efectuado en el Acuario Nacional en La Habana. “Fue en la semana de receso escolar del mes de abril; soy una de las ganadoras. Ya un profesor me aconsejó escribir sobre los delfines de agua dulce: ¡Acepté!

Todavía es muy pequeña, pero sabe que los daños ocasionados al medio ambiente nos afectan a todos. “Podemos desaparecer como seres humanos si no cuidamos al planeta desde el polo norte al polo sur. Cada persona grande o pequeña puede contribuir a salvar el gran hogar donde vivimos”.