Muestra elementos positivos en Cuba la gestión de Cooperativas No Agropecuarias

La Habana, 31 ago.- Los resultados de una evaluación del experimento relativo a la creación de Cooperativas No Agropecuarias (CNA) en Cuba, a seis años del surgimiento de las primeras 126, muestran elementos positivos de su gestión así como aquellos que limitan su desarrollo.

Estos ratifican la validez del proceso que ha permitido al Estado y al Gobierno concentrarse en complejas tareas que le son propias, afirmó a la prensa Yovana Vega Mato, miembro de la Comisión permanente para la implementación y desarrollo de los Lineamientos.

Tales asociaciones tributan a la eficiencia económica, generan empleos y permiten desplegar iniciativas e impulsar las fuerzas productivas, en función de los objetivos del desarrollo socialista, dijo.

Señaló que los impactos económicos más favorables se muestran en las actividades de la construcción, los servicios personales y técnicos, así como en las cooperativas del sector de industria.

Según Vega Mato persisten restricciones para su desarrollo, como el limitado acceso al mercado mayorista y a los servicios conexos, así como desviaciones en la gestión de algunas cooperativas, asociadas fundamentalmente a indisciplinas y violaciones de la legalidad.

Entre ellas destacan la apropiación indebida de recursos e ingresos y corrupción, existiendo, en algunos casos, concertación entre cooperativas y entidades estatales.

Se identificaron también CNA que materializan una parte importante de su gestión contratando fuerza de trabajo asalariada y comprando servicios a terceros, deficiencias en los registros contables y marcadas diferencias en los anticipos percibidos por los socios que ejercen como directivos, con respecto a los que realizan labores directas en la actividad fundamental.

La utilización de créditos bancarios con fines distintos a los conceptos por los que fueron otorgados, la existencia de irregularidades en los presupuestos de obras de la construcción y en las facturaciones y cobros, así como una tendencia al incremento de precios, fueron detectadas de igual manera.

Además, a decir de Vega Mato, no se han materializado las transformaciones previstas en la gestión y en la imagen de las CNA correspondientes a la actividad de la gastronomía.

De las 398 cooperativas no agropecuarias existentes, 151 están vinculadas a la gastronomía, 81 al comercio, 59 a la construcción, 34 a la industria, 29 a Servicios Personales y Técnicos, 17 a Ornitología, 12 a Transporte, tres a Alimentaria, siete a Energía y cinco a Servicios Contables.

Territorialmente, el 80 por ciento de estas formas de gestión se concentran en La Habana (235), Artemisa (64) y Matanzas (18). (Texto y Foto: ACN)