Legisladores de EE.UU. denuncian fallos sobre muerte de niña migrante

Washington, 19 dic .-Congresistas estadounidenses consideraron hoy la existencia de fallos sistemáticos muy perturbadores en la muerte de una niña migrante guatemalteca de siete años de edad bajo la custodia de autoridades norteamericanas.

 

El problema comenzó cuando la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza violó la ley y no notificó al Congreso dentro de las 24 horas estipuladas que la menor Jakelin Caal había fallecido bajo su responsabilidad, afirmó en conferencia de prensa Joaquín Castro, representante demócrata por Texas.

Junto a varios colegas, Castro visitó este martes el puerto de entrada de Antelope Wells y la estación de la Patrulla Fronteriza de Lordsburg, en Nuevo México.

Por ese punto de acceso ingresó la niña guatemalteca a Estados Unidos y quedó en custodia de los agentes previo a su fallecimiento el último 8 de diciembre.

De acuerdo con un comunicado de la Patrulla Fronteriza, del cual informó el periódico The Washington Post el 13 de diciembre, la menor llevaba varios días sin comer o tomar agua en el momento de su detención.

Sin embargo, no se esclareció si la pequeña recibió alimentos o atención médica a lo largo de la noche antes de sufrir convulsiones.

Castro mencionó que sostuvo una conversación con Kevin McAleenan, comisionado de Aduanas y Protección Fronteriza, quien admitió que la agencia violó la ley federal.

También descubrí en ese diálogo que hubo otros hechos, durante el viaje en autobús para ser procesada, de unos 150 kilómetros, en el cual la menor comenzó a presentar síntomas graves de falla física, no había nadie que pudiera ofrecerle ningún tipo de ayuda médica, explicó.

A juicio de Castro, los legisladores necesitan ver cómo están equipadas las estaciones de la Patrulla Fronteriza para proteger la salud y la seguridad de los inmigrantes.

Varios de los acompañantes de Castro, como su colega Ben Ray Luján (Nuevo México), exigieron una investigación independiente sobre la muerte de la chica.

Luján denunció que las instalaciones visitadas no cuentan con agua corriente ni un área para bañarse, y la comida se reduce a barras de granola (alimento formado por nueces, copos de avena, miel y otros ingredientes naturales) y cajas pequeñas de jugo.

Por su parte, el representante Raúl Ruiz (California), médico de formación, opinó que la niña debe haber mostrado signos que alertaran a los agentes a brindarle atención médica.

Cualquiera que esté deshidratado se ve realmente enfermo, tal vez se pudo haber pedido una evacuación aeromédica y ella pudo haber sobrevivido, sostuvo.