Ladrón de celulares llama a emisora radial para dar consejos sobre cómo protegerse

[:es]Un ladrón de celulares llamó a la emisora colombiana la W mientras los periodistas recibían, en vivo, las opiniones de los ciudadanos sobre el aumento de robo de celulares en el país. El hombre, que dijo llamarse Juan Carlos, explicó que había decidido comunicarse porque quería “aportar”.

“Perdóname (le dijo a la conductora del programa) si va a sonar a cinismo pero quiero aportarle que la culpa no es de la policía, ni de Asomóvil (Asociación de la Industria Móvil de Colombia), sino de aquellos padres, que no sé cómo hacen y porqué lo harán, sacan y le regalan a su hijo o hija menor de edad un celular de 1 000.000 o 1.500.00 pesos (342 o 513 dólares), y los chicos andan envolatados (distraídos) y se puede sustraer el celular rápidamente. En mi caso no necesito mostrar arma”.

“La culpa es de los ladrones”, exclamó la conductora, quien, en todo caso, trató de mantener la calma frente a la explicación del ladrón. Juan Carlos siguió: “Quiero que seas imparcial, no quiero que te vayas a inclinar, porque la idea es participar y ser muy puntuales. Estamos en un país donde la pobreza todavía se ve por todas las esquinas de este país, permitimos una cantidad de cosas, entonces cómo podemos exigirle a un ladrón que no vaya y se robe 500 mil pesos (171 dólares) de una persona que los tiene ahí puestos (hace referencia al celular)”, explicó.

Otro de los periodistas lo interpeló diciendo que la gente ha conseguido los celulares trabajando y con mucho esfuerzo, y que ladrones como él deberían estar en la cárcel.

El hombre siguió dando su punto de vista y reiteró que en resumen no hay que “dar papaya”, como se dice en Colombia. Es decir, que las personas no deberían dejarle tan fácil a los delincuentes sus pertenencias, porque ni necesitan armas, ya que la gente muestra sus aparatos electrónicos en cualquier lugar. Y que como es tan sencillo, muchos ladrones se han pasado a esta modalidad.

La conductora continuó la entrevista buscando que el hombre le contara más detalles sobre el modo en que cometen los delitos. Pero él le respondió que lo que le consultaba ya eran “cuestiones laborales”.

Alcanzó a decir que antes de ser ladrón fue ayudante de construcción y que no había seguido porque “tal vez la mano de obra no era bien paga, para vivir en este país dignamente sin necesidad de estar como mendigo. Perdónenme, suena a cinismo, el que me está escuchando me quiere poner a la horca pero es opinable cuando se vive, cuando se está ahí”.

Señaló que ahí se ganaba casi un salario mínimo (este año es de 737.717 pesos – 252 dólares) y que ahora como ladrón “tal vez ese mismo mínimo pero de una manera, no sé, no apta para el Gobierno, para la sociedad”.

Le preguntaron que por qué había llamado y respondió que porque quería opinar y felicitarlos por el programa. Y ahí un tercer periodista le preguntó, en tono de doble sentido, que si era que entre robo y robo escuchaba el programa.

“Jamás quiero que lo vayan a saber (sus hijos). No quiero problemas con ellos porque también están en una etapa de adolescencia”, agregó.

Finalmente, le preguntaron qué le diría a una mamá, a quien le mataron un hijo al robarle un celular. “Es tremendo que pase esta tragedia en una familia de cualquier ser humano. Pero muchas veces evalúo desde la condición en la que me encuentro y digo, si muchas personas pueden optar por no exponer su vida… Creen que poniendo resistencia van a ganar”, respondió.

Directamente, la conductora le dijo que sonaba muy descarado.

De acuerdo con Asomovil, cada dos minutos roban un celular en Colombia. Unos 424.000 equipos fueron robados durante los primeros cuatro meses del año. Bogotá sigue siendo el epicentro donde hay más robos. Y es la modalidad de cosquilleo (hurto que consiste en tocar uno de los bolsillos del pantalón de la persona y cuando se da cuenta, la distraen y le sacan el celular o dinero del otro bolsillo) la más frecuente. Sobre todo, en los medios de transporte.

(RHC/con informacion de cubadebate)[:]