[:es]ZED Mariel y la inversión extranjera en Cuba[:]

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La Habana, 26 dic.- Puesta en funcionamiento hace apenas tres años, la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZEDM) sobresale entre las propuestas más atractivas de Cuba para la Inversión Extranjera Directa (IED), coinciden empresarios y autoridades del país.

 

A inicios de diciembre de 2016, el enclave recibió nuevamente amplio destaque mediático, tras el anuncio de que personas naturales extranjeras no residentes en la Isla podrán trabajar allí.

Según la resolución emitida por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, los concesionarios y usuarios establecidos en la ZEDM tienen facultad para realizar dichas contrataciones de manera directa, hasta un límite que no exceda el 15 por ciento del total de sus trabajadores.

Publicada el 8 de diciembre en la Gaceta Oficial No.40 Extraordinaria, la normativa fija, además, que podrán aprobarse de manera excepcional porcentajes superiores al 15 por ciento para casos puntuales y justificados.

La expansión de las IED en el Mariel puede ocurrir bajo tres modalidades: empresa mixta, asociación económica internacional y compañía con capital 100 por ciento extranjero, según refrenda el Decreto Ley 313, que dio origen a la ZEDM en septiembre de 2013.

Entre los sectores priorizados para los negocios, el gobierno incluyó a biotecnológico y farmacéutico, de envases y embalajes, energías renovables, industria, agricultura, industria agro-alimentaria, electrónica, inmobiliario e inversiones en Infraestructura, entre otros.

En los últimos dos años, las autoridades cubanas aprobaron 83 nuevos proyectos de IED por un valor superior a los mil 300 millones de dólares; lo que incluye 14 negocios en instalaciones preexistentes, 15 nuevos emprendimientos en el Mariel y 54 ejecuciones en distintas provincias, indican datos del Ministerio del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera (Mincex).

El titular del Mincex, Rodrigo Malmierca, anunció en la más reciente Feria Internacional de La Habana (Fihav 2016) que la cartera de oportunidades de negocios 2016-2017 contiene 395 proyectos, cuyo monto sobrepasa los nueve mil 500 millones de dólares.

Confirmó el ministro que hay 24 iniciativas inversionistas para la ZEDM y 111 vinculadas a varias provincias, con el propósito de incentivar encadenamientos productivos.

Actualmente el Mariel cuenta con 19 usuarios aprobados: 10 empresas de capital 100 por ciento extranjero, cuatro compañías mixtas e igual número de nacionales y una asociación económica internacional a partir de un contrato de administración de servicios entre Francia y la Isla, avala el Mincex.

Para Thai Binh Global Investment Corporation S.A., de capital 100 por ciento vietnamita, la política cubana resulta muy atractiva pues, entre otras ventajas, ‘no tenemos que pagar aranceles por la importación de materiales de construcción y equipamiento’, afirmó la directora adjunta de inversiones, Vi Nguyen Phuong.

Nuestra corporación instalará una planta de pañales desechables y almohadillas sanitarias en la ZEDM, teniendo en cuenta la favorable experiencia comercial con esta nación caribeña por espacio de 20 años, comentó.

Al decir de Ramón Secades, representante de la firma mixta cubano-española Teconsa S.A., en enero de 2017 prevén iniciar la construcción de una planta en el Mariel con vistas a producir estructuras metálicas para distintos tipos de edificaciones.

Mientras, el director de negocios de la Financiera Iberoamericana S.A., José Miguel Cantó, destacó que decidieron instalar allí una sucursal con el propósito de otorgar financiamientos a corto, medio y largo plazos.

‘Esperamos tener nuestra oficina abierta próximamente y estamos en conversaciones con algunos clientes’, anunció Cantó en Fihav 2016.

Por su parte, ArCo 33 S.A., de capital 100 por ciento sudcoreano, planea fabricar jeringuillas desechables. El presidente de la firma, Ki Se Lee, informó que prevén entregar anualmente de 60 a 70 millones de unidades con destino al mercado nacional, y después ampliar capacidades para vender a otros países de Latinoamérica y el Caribe.

A juicio de Lee, la ZEDM cuenta con una ubicación geográfica privilegiada para las proyecciones de exportación de su empresa; ‘es un éxito para el país y esperamos que para nuestra empresa también’, acotó.

En noviembre de este año, Paul Polman, presidente de Unilever en el nivel mundial, colocó en el Mariel la primera piedra de la que será la planta del negocio mixto Unilever Suchel S.A. Con un costo superior a los 35 millones dólares, manufacturará productos de aseo, limpieza y cuidado personal y del hogar de marcas globales como Sedal, Rexona, OMO, LUX y Close-UP.

La fábrica cubrirá un área de 40 mil metros cuadrados e iniciará sus operaciones en 2018, dotada de una instalación para el tratamiento del agua residual y un sistema de generación de vapor de alta eficiencia, que permitirá reducir las emisiones de dióxido de carbono, informaron los ejecutivos de Unilever Suchel S.A.

En opinión de Miguel Kozuszok, vicepresidente ejecutivo de Unilever para América Latina y el Cono Sur, ‘relanzar a Unilever en Cuba es ahora una realidad; además, es una pieza clave en nuestra estrategia de negocio en América Latina y el Caribe’.

Nunca hubo mejor momento para invertir en Cuba, estimó Polman, quien destacó el interés de satisfacer las necesidades del mercado interno con surtidos de alta calidad.

También en noviembre de 2016, la firma mixta cubano-brasileña Brascuba Cigarrillos S.A. puso la primera piedra de su futura instalación en el Mariel. La obra, con un aporte conjunto de casi 100 millones de dólares, ocupará un área total de 10,8 hectáreas y dispondrá de la más avanzada tecnología.

Con ello Brascuba duplicará las capacidades productivas actuales para la fabricación de cigarros en el país, señalaron los representantes de la empresa, quienes prevén la apertura de la planta a fines de 2018.

Por la parte brasileña, el vicepresidente y director financiero de la empresa Souza Cruz, Leonardo Senrra, calificó el proyecto como un paraíso, tanto por la belleza del lugar como por las posibilidades económicas.

Ubicada a unos 45 kilómetros al oeste de La Habana, la ZEDM abarca un área total de 465,4 kilómetros cuadrados. No es una Zona Franca, sino una porción del territorio nacional regulada por regímenes especiales a fin de atraer inversiones hacia la producción de bienes y servicios de alto valor agregado.

De acuerdo con la concepción del gobierno, se privilegian los negocios que aporten innovación, tecnologías limpias y generen concentración industrial.

El objetivo fundamental, expuesto por el Mincex, es sustituir importaciones, incrementar las exportaciones, fomentar el empleo y propiciar encadenamientos productivos con las empresas ubicadas en el resto del archipiélago.

Uno de los principales aciertos de la ZEDM es su Terminal de Contenedores de Mariel, inaugurada el 27 de enero de 2014; se trata de una moderna instalación, administrada por la compañía PSA Internacional, de Singapur, líder mundial en desarrollo, inversión y operación de puertos.

Por su ubicación privilegiada en el cruce de los ejes del tráfico marítimo internacional, la Zona es considerada aquí como una puerta de Cuba abierta al mundo, con propuestas de negocios altamente rentables y sostenibles.

Por María Julia Mayoral/ Periodista de la Redacción de Economía de Prensa Latina.

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