Crisis económica mundial: en callejón sin salida
La Habana, 26 nov.- El impacto que como piedra caída en el charco tiene la crisis económica mundial ocupó el debate de la noche de este jueves a los panelistas de la Mesa Redonda, trasmitida por la radio y la televisión cubanas.
Las diferentes aristas del asunto, que atañe a pobres y ricos, fueron analizadas con la presencia del doctor Osvaldo Martínez, Presidente de la Comisión de Asuntos Económicos del Parlamento cubano.
Según resumió, el desempleo, el descenso de ingreso y reducción de demanda son tres elementos engranados dentro del proceso de la situación económica actual.
Como tal la crisis económica iniciada en 2008 en los Estados Unidos tuvo sus principales factores causantes en los altos precios de las materias primas, la sobrevalorización del producto y una crisis alimentaria mundial.
Además la elevada inflación planetaria y la amenaza de una recesión en todo el mundo, así como una crisis crediticia, hipotecaria y de confianza en los mercados.
Calificada por la presidenta argentina Cristina Fernández como Efecto Jazz, la crisis inició en Estados Unidos y se expandió hacia el resto del mundo, a diferencia de crisis anteriores originadas en países emergentes.
El caso es que sus influencias tocan a todos los rincones del planeta como puso de manifiesto Faustino Cobarrubia del Centro de Investigaciones de la Economía Mundial.
Explicó el especialista que el mundo asiste a una crisis de la hegemonía, y las grandes economías hoy decrecen brutalmente, tal es el caso de Alemania, Italia y Francia.
Por citar algunos ejemplos dijo que a pesar de la cantidad de dinero que se ha inyectado en Estados Unidos a las grandes empresas, estas se encuentran menos representadas en el mundo comercial, mientras que en Japón una de cada tres personas es pobre.
En coincidencia, los especialistas vaticinaron los incrementos en los niveles de pobreza, desempleo, hambre, y muy relacionado el crecimiento de enfermedades, como el VIH-Sida, asociado a esta situación perentoria.
A diferencia de opiniones allende los mares, los economistas cubanos consideran que el impacto de la crisis afecta el cambio climático, y una propicia ocasión de encaminar los esfuerzos debía ser la próxima Cumbre en Copenhague.
Al menos ese pudiera ser el principio de una salida a ese incierto callejón. (AIN)
