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Socialistas venezolanos preparan posiciones para elecciones en 2010

Socialistas venezolanos preparan posiciones para elecciones en 2010 Caracas, 22 oct.- Con una impresionante membresía superior a siete millones de personas, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) se prepara para un congreso extraordinario que definirá estrategias, preámbulo de las elecciones parlamentarias de 2010.

Según las previsiones, el próximo 15 de noviembre, dos millones 352 mil 545 militantes organizados en 104 mil patrullas (organizaciones de base) territoriales y 16 mil patrullas de trabajadores ejercerán el sufragio para elegir a los delegados.

Por disposición de la dirección de la organización, sólo podrán elegir delegados al I Congreso Extraordinario del PSUV aquellos miembros del partido inscriptos en las patrullas, que hayan votado en los pasados comicios.

En total se prevé instalar mil 483 centros de votación con cuatro mil 500 mesas de votación automatizadas para la elección que determinará la conformación del congreso, a realizarse del 21 de noviembre hasta el 13 de diciembre.

El congreso servirá para delinear la proyección estratégica del mayor partido de la historia del país, luego de una reorganización de las bases de la organización, camino a unas elecciones parlamentarias en 2010 consideradas cruciales.

El presidente de Venezuela y del PSUV, Hugo Chávez, adelantó que el propósito es conseguir al menos dos tercios de la Asamblea Nacional compuesta por 167 miembros, como garantía para seguir profundizando los cambios de enfoque socialista.

La meta, que para muchos luce difícil pero no imposible, se realizará en unas elecciones en el segundo semestre de 2010, sin fecha específica todavía, pero en un ambiente más complicado que las anteriores.

En la votación anterior, los aliados de Chávez coparon casi el ciento por ciento de la Asamblea Nacional debido a la política de abstención de la oposición, un error estratégico cometido en un intento por descalificar el órgano legislativo.

De acuerdo con todos los indicios hasta hoy, los partidos opositores se plantean ahora la participación y ya iniciaron movimientos encaminados a tratar de conseguir alianzas que propicien candidatos unitarios.

Aunque la creación de una alianza opositora perfecta parece muy difícil, debido a las apetencias de grupos y personales, expertos consultados por Prensa Latina no descartan que se consigan acuerdos en alguna proporción.

El intento busca frenar el impulso de los cambios que encabeza Chávez desde 1999 y en cuya proyección socialista el mandatario atribuye un papel importante como garantía de continuidad al PSUV, creado ante su llamado a unir las fuerzas de izquierda.

En el contexto político actual venezolano la existencia de un partido de esa categoría, con una propuesta programática bien definida, constituye un factor importante, ante la desorientación opositora.

Luego de 10 años en la oposición, los partidos de la vieja y nueva derecha de Venezuela ha sido incapaces de estructurar una propuesta alternativa al llamado Socialismo del Siglo XXI de Chávez, más allá de críticas a toda proposición oficial.

La negatividad opositora abarca censuras hasta programas como Barrio Adentro, que brinda servicios médicos gratuitos a más de 15 millones de personas, o los programas de educación gratuita, también de amplios beneficios populares.

Sin brújula y en medio de disputas internas por liderazgo, la oposición es incapaz de enfrentar el carismático liderazgo de Chávez que goza de más del 50 por ciento de popularidad, según las encuestas más recientes.

En contra, como ha reconocido el propio presidente venezolano, tiene la ineficiencia de algunas estructuras estatales, ante lo cual Chávez lanzó su política de las tres R: revisión, rectificación y reimpulso.

La proyección, que propició el reimpulso del emblemático programa Barrio Adentro, indica una capacidad autocrítica, de la que adolece la oposición, que insiste en una propuesta de capitalismo "per se" con baja credibilidad en el país suramericano. (PL)