Canadienses dispuestos a intensificar lucha por libertad de Los Cinco

Ottawa, 7 ene. – Agrupaciones sociales de Canadá reafirmaron su disposición a redoblar las acciones este año por la excarcelación inmediata e incondicional de cinco cubanos presos desde 1998 en Estados Unidos por prevenir actos terroristas organizados en Florida.

Noah Fine, coordinador del Comité de Vancouver por la libertad de Gerardo Hernández, Ramón Labañino, Fernando González, Antonio Guerrero y René González, dijo que los días 5 de cada mes su organización preparará protestas para pedir el regreso de esos hombres a sus hogares.

En similares términos se pronunció Thomas Davies, del grupo Comunidades de Vancouver en Solidaridad con Cuba, al destacar que el apoyo al caso creció en el planeta y abogar por nuevas iniciativas para divulgar la verdad sobre Los Cinco- como se conocen los antiterroristas a nivel internacional.

Cuatro de los luchadores enfrentan severas sanciones por dar seguimiento a grupos violentos radicados en Miami, desde donde planifican acciones como las que en los últimos 53 años dejaron más de tres mil 400 víctimas en Cuba.

Mientras, René González salió de la prisión el 7 de octubre de 2011 después de 13 años, y ahora tiene un castigo adicional de tres años bajo libertad supervisada en esa misma ciudad.

Fine y Davies hicieron esas declaraciones durante una manifestación realizada frente a la galería de arte de Vancouver como parte de la campaña global por la liberación de Los Cinco.

Los participantes en el acto también exigieron el regreso de René a Cuba y el otorgamiento de visas a su esposa Olga Salanueva, así como a Adriana Pérez, cónyuge de Gerardo, para visitarlos en Estados Unidos. Asimismo, se sumaron a un tuitazo mundial abierto el sábado anterior y donde individuos, medios de prensa, organizaciones políticas y sociales de Brasil, Argentina, Francia, Estados Unidos, Canadá, Nicaragua, México, Cuba y Colombia, entre otros países, colgaron comentarios en respaldo a los luchadores cubanos.

Los Cinco recibieron largas y desproporcionadas penas tras un juicio amañado en Miami, cuyos medios de comunicación recibieron presupuesto federal con el objetivo de montar una campaña adversa y asegurar que fueran condenados.

Autoridades de Washington entregaron grandes fondos a reporteros de CBS, The Miami Herald, El Nuevo Herald, el Diario las Américas, Radio y TV Martí y WAQI, entre otros, que actuaron como agentes secretos para manipular la opinión pública, persuadir al jurado e interferir en el proceso legal.

Abogados de los antiterroristas cubanos buscan demostrar que entre 1998 y 2001 la población miamense recibió a través de la prensa un arsenal de propaganda pagada por el Gobierno con influencia negativa sobre el juicio y los acusados.(PL)