Un río humano despide en Yaguajay a El Negro

Un río humano despide en Yaguajay a El Negro Yaguajay, Sancti Spíritus.— Miles de yaguajayenses dieron este jueves el último adiós al diplomático cubano Crescencio Nicomedes Galañena Hernández, un hijo ejemplar de este municipio secuestrado en Buenos Aires, Argentina, el 9 de agosto de 1976, asesinado y posteriormente desaparecido.

Crescencio Nicomedes Galañena HernándezLos restos de El Negro, como le llamaban sus más allegados, fueron honrados en la Casa de la Cultura, hasta donde llegaron en la mañana de ayer familiares, amigos, combatientes, jóvenes y niños del territorio en una fila que solo terminó con la partida del cortejo hacia el Panteón de los Caídos por la Defensa.

Víctima de la tenebrosa Operación Cóndor, nacida del contubernio entre la Agencia Central de Inteligencia y las dictaduras del continente, Galañena Hernández fue recluido junto a su compañero de trabajo, el pinareño Jesús Cejas Arias, aún no localizado, en "Automotores Orletti", un centro clandestino de detención y tortura radicado en la misma capital.

Desaparecidos desde entonces, sus restos fueron localizados en junio de este año en un tanque lleno de concreto en predios cercanos al aeródromo de San Fernando, en las afueras de Buenos Aires, posteriormente identificados y repatriados en fecha reciente.

En la despedida de duelo al funcionario diplomático inhumado la víspera, Julio Antonio Pérez Ruiz, primer secretario del Partido en el municipio, denunció el rastro de sangre dejado por la Operación Cóndor en América Latina y los actos de terrorismo que a lo largo de más de medio siglo ha debido enfrentar nuestro país.

En su intervención el dirigente elogió las convicciones morales, la lealtad y la valerosa resistencia que opusieron a sus captores los jóvenes secuestrados en Buenos Aires en 1976, a quienes definió como ejemplos de revolucionarios que las presentes y futuras generaciones no deberán olvidar.

Pérez Ruiz expresó el agradecimiento de Cuba a las autoridades y al pueblo de Argentina por la cooperación en la búsqueda de los restos y elogió el trabajo llevado a cabo en todo este tiempo por el Centro de Investigaciones Históricas de la Seguridad del Estado.

"Siempre tuve la esperanza de que lo encontrarían porque la Revolución no deja a nadie abandonado", testimonió a la prensa Mario Galañena, uno de los hermanos de El Negro, a quien recuerda como un joven cariñoso, sencillo y muy querido en la zona.

José Luis Méndez Méndez, investigador y representante legal de las familias ante el gobierno argentino, aseguró a Granma que próximamente se va a recomenzar la búsqueda de los restos de Cejas Arias en un predio de alrededor de 10 000 metros cuadrados, también en la zona de San Fernando, donde se trabajará de manera minuciosa y con equipamiento especial. "Estamos esperanzados en poder encontrarlos también", dijo el experto.

A propósito del homenaje realizado en Yaguajay, Graciela Ramírez, presidenta del Comité Internacional por la Liberación los Cinco, leyó un mensaje de los luchadores cubanos en el que reconocen que el martirologio de Galañena Hernández y Cejas Arias se unió al de miles de argentinos frente a "la historia de abusos y desmanes que el imperialismo norteamericano ha tejido en Nuestra América".

A las honras fúnebres y la ceremonia de inhumación de Galañena Hernández asistieron José Ramón Monteagudo Ruiz, integrante del Comité Central y primer secretario del Partido en Sancti Spíritus y la Excelentísima Señora Juliana Isabel Marino, embajadora extraordinaria y plenipotenciaria de la República Argentina en La Habana.

(Tomado de Granma)