El curujey calmó la sed de Martí

El curujey calmó la sed de Martí Una de las plantas mencionadas por el Héroe Nacional cubano, José Martí, en su Diario de Cabo Haitiano a Dos Ríos, es el curujey.

Ello no es casual, el Apóstol fue uno de los tantos combatientes que, durante las guerras independentistas contra el colonialismo español, aprovechara el agua depositada en las hojas de esta especie para saciar la sed. Así señaló el 1ro. de mayo de 1895: … de un curujey, prendido a un jobo, bebo el agua clara.

Precisamente por esa característica de apaciguar al sediento en medio del camino hay quien le llama la planta del caminante.

Por error, hay quienes creen que se trata de una planta parásita, pues crece sobre otros árboles o arbustos, pero no, el curujey, perteneciente a la familia de las Bromeliáceas, es epífita, eso significa que aunque crece sobre otras plantas, no se alimenta a expensas de ellas, sino que estas le sirven de sostén.

Muy común en el monte e incluso en árboles aislados, almacena abundante agua de lluvia en la base envainadora -forma una especie de roseta- de sus hojas.

Además del valor ornamental, dada su belleza, de numerosas especies, los campesinos señalan que sus hojas frescas, machacadas y mezcladas con manteca, constituyen un excelente remedio que se aplica a las hemorroides, tópicamente.

La infusión de las hojas de la Tillandsia sp., mezcladas con gandul y yerba Paraná, es recomendada para tratar la giardiasis; de igual manera disminuye los niveles de azúcar en sangre, y es un antiparasitario.

La razón de porqué vive sobre otros árboles la explica una leyenda. Esta señala que el curujey se fue a vivir de parásito al más alto de los árboles del bosque. Estos, envidiosos, protestaron ante Olofi que, salió en su busca y al hallarlo le preguntó qué hacía allí.

El curujey, percatado del complot del que era víctima, respondió de inmediato que quería estar cerca del dios para contemplarle y verle mejor. Fue entonces que éste le dijo que podía quedarse donde estaba.

Por: Lucía Sanz Araujo/ Radio Rebelde