Cuba continúa desenmascarando al gobierno de Estados Unidos

Cuba continúa desenmascarando al gobierno de Estados Unidos Aunque parezca descabellado, la Casa Blanca ha destinado casi tres mil millones de dólares a la contratación de Alan Gross, recién condenado en Cuba, a quince años de privación de libertad, por el delito de actos contra la independencia o la integridad territorial del Estado.

Ante la crítica situación internacional en sensibles temas como la alimentación, el medio ambiente, la violencia o el narcotráfico, los Estados Unidos invierten sumas tales, para satisfacer su vieja apetencia por la llave del golfo.

Pero el cerrojo permanece clausurado para el Norte, precisamente gracias a móviles tan detestables como el que impulsó a Gross a incrementar en la Isla la presencia de redes satelitales de comunicación, destinadas a la propaganda subversiva.

Amplía los detalles el sitio CubaDebate, cuando afirma que la suma fue pagada por la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos –USAID-, en contrato con la compañía Development Alternatives Inc. o DAI que “envió a Gross a Cuba como parte de los programas de la USAID de financiamiento de la 'democracia'”.

Y es que, subordinada al Departamento de Estado norteamericano, la USAID tiene en su haber un viejo historial de financiación a la disidencia en la Isla, bajo el “inocente” parlamento de “ayudar”, según CubaDebate, a las familias de quienes se hacen llamar presos “de conciencia”.

Otra de las escandalosas “misiones” de la USAID en Cuba es el “fortalecimiento” -y ya apreciamos de qué índole y con cuántos millones- a la “sociedad civil” en el mayor archipiélago de las Antillas, y quizás el término encierre a bochornosas minorías como las Damas de Blanco.

Una vez más la nación caribeña, con la verdad sobre el tapete y sin vacilar un instante, pone al descubierto las truculencias imperiales, mediante un nuevo capítulo de la serie Las Razones de Cuba. En esta ocasión -precisamente-, acerca de los desmanes de la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos.

Como ya es habitual, la presentación al mundo de contundentes testimonios despoja al gobierno de Estados Unidos del acostumbrado disfraz de cordero, diseñado para solapar garras y dientes.

Mentiras bien pagadas, es el título del capítulo que esta noche demostrará, más con hechos que con palabras, las verdaderas Razones de Cuba.

(Tomado de Radio Cadena Agramonte)