En finca santacruceña pretenden sobrepasar niveles agrícolas comprometidos

Santa Cruz del Sur, 23 ene .- Rogelio Lamorú Escalante no es un improvisado en asunto de tierras y plantaciones. Él, uno de los descendientes de una voluntariosa familia campesina, hace 8 años cogió por las riendas una caballería de tierra en usufructo que solicitó por el decreto Ley 259.

“Ni mi familia ni yo ibamos a emprender una tarea tan fuerte sin antes coincidir en la misma idea. Sembrar sin conocer es como poner dinero en una ruleta. Nos pusimos de acuerdo sin temor a los sacrificios para poner en los surcos la semilla de la dignidad productiva”.

Casi la totalidad del área se encuentra despejada de marabú. En una parte de ella hay cultivos de plátanos burro y fruta, 2 hectáreas de tomates, media de frijol negro y 0.90 de maíz. “Vamos a alistar otro terrero para plantar una hectárea de yuca e igual cantidad de boniato. Incluso poseemos nueva semilla de plátano burro, pues deseamos aumentar su producción”.

La finca La Herradura, donde Lamorú quiere echar raíces, posee terreno muy fértil de color negro, favorecido por una parte del largo y estrecho cauce del río Najasa. De la estación de bombeo más cercana se sirve el infatigable santacruceño de la comunidad rural Curajaya, para regar sus cultivos a través de rústicos canales.

“En una reunión efectuada en la Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) “Pepito Tey” a la cual pertenezco se informó sobre los más de 30 millones de dólares que el país invertirá en recursos para la agricultura, donde están incluídos los sistemas de riego, entre otros. Con todos esos medios y servicios en las manos de los campesinos el programa alimentario irá en desarrollo acelerado”, afirmó Lamorú.

Al campo nunca llega solo, el apoyo imprescindible de Gladis Domínguez Rojas, la esposa, y su hijo Reidel le permite al productor desenvolverse con paso superior. “Somos la mano derecha de Rogelio. Usted sabe que los campesinos no tenemos vacaciones; la agricultura si no se atiende fracasa. Para nosotros nunca es domingo”.

El 2015 no resultó satisfactorio en los rendimientos de La Herradura, debido a la agresividad de algunas plagas, sin embargo se entregaron a la “Pepito Tey”, para la comercialización con la empresa de Acopio , la yuca extraída en una hectárea, similar superficie de maíz verde y 2 toneladas de plátanos burro y fruta.

Destacados sí fueron en las contribuciones de leche al Lácteo del territorio, al sobrepasar, este experimentado ordeñador, el plan fijado en mil litros. Al cierre del actual calendario deberá haber cumplido con los 2 mil 400 unidades establecidas en el convenio individual. “Emprenderé las extracciones a partir del mes de junio, en esa fecha las seis vacas y las 4 añojas deberán encontrarse en proceso de gestación”.

Condiciones y potencialidades hay suficientes en esa finca del Consejo Popular “Jesús Suárez Gayol”. Sobrepasar los niveles agrícolas comprometidos es allí ley sagrada. En las mentes de Lamorú y la Domínguez ya se fragua la idea de llegar a la media caballería de cultivos varios.