Cuba resalta en ONU numerosos desafíos para el desarrollo

Naciones Unidas, 8 oct.- La representante permanente alterna de Cuba ante ONU, Ana Silvia Rodríguez, resaltó los desafíos para el desarrollo que enfrentan numerosos países y la falta de compromiso al respecto de los mayores poseedores de riquezas.

 

Al intervenir en el debate de la Segunda Comisión de la Asamblea General de Naciones Unidas, señaló cómo las brechas afectan especialmente a las naciones mas vulnerables, en particular las de África, los países en desarrollo sin litoral, los pequeños Estados insulares y los pueblos sometidos a ocupación extranjera.

Pero la plena y oportuna implementación de la Agenda 2030 no seró posible mientras persistan acciones unilaterales, proteccionistas y excluyentes, en detrimento de soluciones multilaterales, observó.

‘Debemos impedir que el sistema internacional se convierta en un instrumento de imposición y legitimación de medidas unilaterales de los más fuertes y poderosos sobre otros, contrario al orden mundial multipolar que necesitamos, basado en reglas y normas, justo y equitativo.’

Además, apuntó la embajadora cubana, se impone que las naciones desarrolladas modifiquen sus insostenibles patrones de producción y consumo y hagan efectivos sus compromisos en materia de financiamiento y transferencia de tecnología.

Si bien la comunidad internacional ha rechazado la imposición de medidas coercitivas unilaterales, todavía persisten tales acciones, denunció. Cuba ha resistido durante casi 60 años el impacto de la aplicación de esas medidas como consecuencia del ilegal, inmoral, criminal e injusto bloqueo impuesto por Estados Unidos, ejemplificó.

Este cerco se recrudece este año con la activación del Título III de la Ley Helms-Burton, rechazado igualmente por la comunidad internacional, agregó la diplomática.

Rodríguez también se refirió a la erradicación de la pobreza en todas sus formas y dimensiones como el mayor desafió que enfrenta ahora la humanidad.

Si bien se reportan avances en aras de lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible, persisten o se agravan las desigualdades, y la polarización social en el mundo, lamentó.

La opulencia y la concentración de ingresos y riqueza de unas pocas personas y países contrasta amargamente con la pobreza y el subdesarrollo en que vive gran parte de la población global, alertó.

En ese sentido, recalcó, es vergonzoso que existan los recursos, la tecnología y la capacidad para revertir esta realidad, mientras falta la voluntad política de los Estados más poderosos para honrar sus compromisos internacionales.

Necesitamos otra arquitectura financiera internacional y una solución duradera y sostenible al problema de la deuda externa, ya pagada varias veces, subrayó la embajadora.

Los países hoy industrializados deben reconocer su deuda histórica y ejercer el principio de ‘responsabilidades comunes pero diferenciadas’, precisó. Asimismo, urge cumplir con los compromisos climáticos, enfatizó, si queremos preservar el planeta y la especie humana.

Ninqún país, ni siquiera Estados Unidos, uno de los principales contaminantes globales, destacó la embajadora, puede renunciar unilateralmente a su responsabilidad internacional ni olvidar su deuda ecológica con la humanidad y las generaciones futuras.