Cuba firma convenios de cooperación científica con Etiopía y Sri Lanka

La Habana, 9 nov.- Representantes de Cuba suscribieron en esta capital documentos de cooperación científica y tecnológica, con sus similares de la República Federal Democrática de Etiopía y la República Democrática Socialista de Sri Lanka.


Elba Rosa Pérez Montoya, ministra de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA) y su colega Ato Reggassa Kefale, ministro de Estado etíope, firmaron un primer convenio por cinco años de duración, aunque puede ser renovado, en una ceremonia en el Palacio de Convenciones de La Habana.


Ambos titulares coincidieron en la organización de eventos con académicos, industriales e institucionales con vistas a la colaboración, la formación de delegaciones a fin de desarrollar programas, iniciativas y proyectos, así como la creación de redes.


Igualmente, en el fomento de intercambio de científicos, incluidos estudiantes de doctorado y post-doctorado, personal técnico y expertos, y la formación de vínculos en las esferas de la biotecnología, tecnología azucarera, industria farmacéutica y tratamiento del cáncer.


Addis Ababa es la capital de República Federal Democrática de Etiopía, con una superficie superior al millón de kilómetros cuadrados de extensión y una población de más de 83 millones de habitantes. Su economía está basada en la agricultura.


Pérez Montoya rubricó, además, un Memorando de entendimiento con Susil Premajayantha, ministro de Ciencia, Tecnología e Investigación de la República Democrática Socialista de Sri Lanka, un país insular de Asia, ubicado en pleno golfo de Bengala.


Los dos funcionarios sentaron las bases para las áreas de cooperación en materia de biotecnología, nanotecnología y mecatrónica, que une las ingenierías mecánica, electrónica, de control y la de informática.


Incluso, la metrología, procesamiento de minerales, adaptación al cambio climático energía renovales y otros campos.


Sri Jayawardenapura Kotte, suburbio de Colombo, es la capital de la nación, que en los siglos XIX y XX llegó a ser una economía de plantación, famosa por su producción y exportación de canela, el caucho y té de Ceilán.


Abarca un territorio de 65 mil 610 kilómetros cuadrados de extensión y una población de más de 20 millones de personas, según estadísticas.