Congreso de EE.UU. aprueba ley para reabrir gobierno por tres semanas

Washington, 26 ene.- El Congreso estadounidense aprobó un proyecto de ley de gastos a corto plazo que permitirá reabrir el gobierno federal durante tres semanas y ponerle fin al cierre más largo en la historia del país.

 

La medida, que había sido anunciada esta tarde en la Casa Blanca por el presidente Donald Trump, permitirá el funcionamiento hasta el 15 de febrero de las agencias y departamentos que se encontraban prácticamente paralizados desde el 22 de diciembre.

Esta legislación, que pasó al escritorio del mandatario republicano para ser promulgada tras recibir el aval de senadores y representantes, no incluye los 5,7 mil millones de dólares exigidos por Trump para construir un muro en la frontera con México.

La demanda de esa suma por parte del jefe de Estado, y su negativa anterior a rubricar cualquier ley que careciera de tales fondos, junto con el rechazo de los demócratas a avalar ese monto para una pared que consideran innecesaria, desencadenaron el cierre que ha afectado a 800 mil trabajadores federales.

Al anunciar este viernes que firmaría el acuerdo para ponerle fin al estancamiento, Trump dijo que un comité bipartidista de líderes y legisladores de las dos cámaras del Capitolio trabajará durante las próximas tres semanas para ‘armar un paquete de seguridad nacional que en breve se convierta en ley’.

‘Durante los próximos 21 días, espero que tanto los demócratas como los republicanos operen de buena fe’, expresó el presidente, quien dedicó la mayor parte de la alocución a defender la necesidad del muro, incluso con argumentos que medios estadounidenses califican de falsos o inexactos.

Permítanme ser muy claro: realmente no tenemos más remedio que construir un muro poderoso o una barrera de acero. Si no recibimos un trato justo del Congreso, el gobierno volverá a cerrar el 15 de febrero o usaré los poderes que me otorgan las leyes y la Constitución de Estados Unidos para hacer frente a esta emergencia, advirtió.

Con este último comentario hizo alusión a sus amenazas anteriores de declarar una emergencia nacional en la frontera sur con el fin de destinar fondos militares a la edificación de la pared sin necesidad de contar con la aprobación de los miembros del Capitolio, una acción que seguramente enfrentaría desafíos legales.

Durante semanas los demócratas llamaron al jefe de la Casa Blanca a reabrir el gobierno antes de pasar a las negociaciones sobre el muro, algo a lo que Trump se había resistido hasta hoy pese al negativo impacto de la paralización.

El presidente aceptó nuestra solicitud de abrir el gobierno y luego debatir la seguridad fronteriza, expresó el líder de la minoría en el Senado, Charles Schumer, quien sugirió en una conferencia de prensa que tal desenlace representaba una validación de la postura adoptada por la fuerza azul.