Candidatura de Lula a Nobel de la Paz recibirá firmas hasta el jueves

Brasilia, 29 ene.- El 31 de enero marcará el fin del período en la recolección de firmas para proponer al expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva al Premio Nobel de la Paz 2019, indica hoy el portal Red Brasil Atual.

 

Según la fuente, para formalizar la candidatura resulta necesario reunir, hasta esa fecha, rúbricas de individuos que encajen en los criterios estipulados por la Fundación Nobel.

Como, por ejemplo, precisa el sitio, ser profesor (a) universitario o director (a) de un instituto de investigación de la paz o incluso poseer el galardón, como es el caso del argentino Adolfo Pérez Esquivel, quien envío una carta al comité del Nobel, proponiendo a Lula.

En la misiva, Esquivel escribió: ‘con el mismo sentido de esperanza que Martin Luther King transmitió cuando dijo ‘Si supiera que el mundo se desintegraría mañana, todavía plantaría mi manzano’, somos muchos los que creen que el Premio Nobel de la Paz a Lula ayudará a fortalecer la esperanza de poder continuar construyendo un nuevo amanecer para dignificar el árbol de la vida’.

La página digital asegura que con la nominación, Esquivel busca reconocimiento a Lula por el hecho de haber sacado a más de 30 millones de brasileños de la pobreza durante sus dos mandatos (2003-2011).

‘Necesitamos superar el hambre, la pobreza y la exclusión social. Nuestra guerra no es para matar a nadie, es para salvar vidas’, prometió el exgobernante, tan pronto asumió su primer mandato.

Una encuesta realizada por la Fundación Getúlio Vargas en 2011 señaló que durante el mandato de Lula, la pobreza cayó 50,64 por ciento en Brasil.

De acuerdo con el Partido de los Trabajadores (PT), durante las dos administraciones del exsindicalista, la tasa de desempleo se redujo cerca del 50 por ciento y se crearon 15 millones de empleos.

También la implementación de programas de educación y salud pública elevó el Índice de Desarrollo Humano (IDH) de Brasil.

El exdirigente obrero se encuentra preso desde abril en la superintendencia de la Policía de Curitiba, capital del sureño estado de Paraná, donde cumple una condena de 12 años de cárcel y un mes por supuestos actos de corrupción.