Artesana popular santacruceña derrocha fantasía en su obra


Santa Cruz del Sur, 22 feb .- “Desde niña me inspiraba coser. Mientras otras de mi misma edad se agrupaban a jugar, yo prefería enternecerme diseñándoles ropitas a las muñequitas de cartón y trapo”.

Hay exquisiteces en la creatividad de Nancy Rosabal Álvarez que sólo se pueden valorar mirando de cerca su trabajo, donde prevalece la fantasía con punteada elegancia, así lo pudo apreciar el público, hace algún tiempo, en la exposición personal “Creación”, exhibida en la galería de la Casa de Cultura “Olga Alonso”, de Santa Cruz del Sur.

Esta jubilada del corte y costura se negó a amontonar el ocio en el hogar, fue la producción de muñecas la que le comenzó a ocupar el tiempo libre.

“Aunque parezca algo contradictorio lo primero que hice fue un mono, empleando tela. Vi en una oportunidad ese modelo de antropoide en el hogar de unas amistades… quise iniciar por ahí”.

El primer muñeco producido por ella se lo entregó espontáneamente a una pequeña. “Al verlo, la niña emprendió el llanto. No quise verla triste por eso se lo regalé. “Nacieron” poco a poco otros mejor confeccionados, sobre todo los rostros”. Su patrón inspirador son los ñiñas rubias y de ojos claros, confirmó.

Mucho se le vio en las ferias de arte popular, la efectuada en el 2008 le resulta imperecedera: “Obtuve el primer lugar”.

Trata, comentó, de hacer pocos trabajos, ¿el motivo?, averiguó el reportero: “Son los malestares de la cervical y la artrosis, insisten en hacerme sentir mal. Cuando puedo “engañar” a esas enfermedades me salgo de la raya… Las muñequitas siguen felices en este hogar”.

En el pensamiento de esta creadora giran, corretean las ideas y los nuevos diseños. Considerables representaciones esperan por surgir. La santacruceña posee el saber inspirador para vestir a sus fascinadoras muñecas. “Continuaré escuchándole a ellas cosas que nadie conoce”.