Advenimiento del 2016 unió en una sola familia a los santacruceños

Santa Cruz del Sur, 2 ene .- La despedida de los 365 días del calendario recién concluido fundió en una sola familia a los habitantes de Santa Cruz del Sur, los que se desearon salud y prosperidad para el 2016 y mucho apego a los compromisos sociales, políticos y económicos en el aniversario 57 del triunfo de la Revolución cubana.

La tradicional comida criolla, encabezada por la carne de cerdo asado, exhortó al acercamiento festivo alrededor de la mesa. Se hizo el anhelado brindis por la buena suerte, despejada de egoísmos, sed de consumismo banal, codicia, falsas convicciones patrióticas, doble moral, desajustados comportamientos sociales, la indecencia y corrupción.

Muchos no hablaron de sus futuros planes, prefirieron dejárselos al destino, pues consideran que es el que dice la última palabra. Cuando los relojes marcaron las 12 de la noche el año viejo representado en diversidad de muñecos fue quemado, se lanzaron incontables cubos de agua hacia las calles, quedaba expulsado lo que se considera perjudicial. Por delante de esa usanza cargaron las maletas aquellos y aquellas decididos a asegurar un viaje al exterior dándole la vuelta a la vecindad comunitaria.

Nuevos 365 días se planificarán en las asiduas faenas ligadas a los diversos sectores en los cuales estamos implicados en la condición de obreros, técnicos y profesionales.

El avance de la economía en este período depende de la absoluta consagración cubana, lo que no quiere decir darle la espalda al básico cimiento: la familia. Los deberes de cada revolucionario seguirán en la misma dirección del sistema socialista que defiende y protege los valores humanos.