Al sur

Niña santacruceña agradece a personal de salud por su vida

Niña santacruceña agradece a personal de salud por su vidaSustos y llantos estallaron al unísono. Yovani Torres Cardero, sin perturbarse, cargó en un santiamén a Darianni Gamboa Martínez, víctima de un terrible accidente casero. A toda prisa fue en busca del transporte a una casa vecina.

“Durante este trayecto ella hizo un sonido extraño, trató de respirar, entonces decidí succionar con mi boca cualquier cosa que le obstaculizara tomar oxígeno por la nariz… pude sacarle tres coágulos de sangre; quiso llorar pero respiró mejor”.

Este tío abuelo logró el objetivo: “Encontré, llegando a su vivienda, un muchacho que tenía un motor. Pudimos llegar bastante rápido al hospital local, donde a la bebé comenzaron a darle las atenciones médicas imprescindibles”.

El pediatra de turno decidió remitirla hacia Camagüey, pues al realizarle los exámenes determinó que la paciente requería un seguimiento más profundo. “Me trasladé con ella hacia el Pediátrico Provincial, donde fue intervenida quirúrgicamente para determinar si tenía coágulos adheridos en el cerebro Los médicos dijeron no haber observado nada anormal, dándome gran alegría”, refiere Marilín Gamboa Martínez, la progenitora.

Durante 23 días la madre acompañó noche y día el ingreso de su hija. “Las atenciones fueron excelentes. Nuestros médicos, enfermeras y pantristas tienen un trato cariñoso, nos sentimos tan ligados como su fuéramos familiares”.

Torres queda reflexivo por unos segundos, remontándose hacia aquella amarga fecha hace nueve años atrás. “No me gusta recordar esto, aunque siento satisfacción al haberle salvado la vida a este angelito…”

Una epilepsia ha quedado como secuela, pero no le ha limitado en nada su inteligencia ni el aprendizaje. “Tengo la cabecita dura al parecer”, dice complaciente Darianni, quien cursa el sexto grado en la escuela primaria Carlos Manuel de Céspedes, ubicada en la comunidad 50 Aniversario.

Ella reside en el poblado rural El Francés, distante seis kilómetros de la cabecera municipal santacruceña, “pero vengo acompañada por mamá y por la tarde, al terminar las clases, ella me lleva de vuelta a casa”. Sus propósitos los tiene definidos. “Quiero ser enfermera; y cuando termine de estudiar me casaré para tener muchos hijos”.

“Nunca olvidaré la asistencia dada por mi tío y los especialistas… Para todos será este inmenso amor que siento en el corazón”. (Raúl Reyes Rodríguez/ Radio Santa Cruz)