Teatro callejero en Festival Nacional de Camagüey

Teatro callejero en Festival Nacional de CamagüeyCamagüey, 10 oct .- La ventaja de acceder a un público más amplio y heterogéneo constituye una de las motivaciones de D’Morón Teatro, que exhibe en el XV Festival Nacional de Teatro de Camagüey su más reciente producción, Troya, una leyenda de barro.

Con gran acogida por los espectadores de esta ciudad durante su primera presentación, la obra ofrece un sui géneris acercamiento a la Ilíada, de Homero, con una concepción de espectacularidad por su trabajo escenográfico y el uso de la técnica de estatuas vivientes.

Actores cubiertos de barro, combinación de utilería en miniatura con las tropas de griegos y troyanos, y en gran formato con el famoso caballo de Troya, y la expresividad contenida de la interpretación, con movimientos lentos y pausados, le otorgan a la pieza sus principales atractivos.

En conversación con la AIN, Orlando Concepción, director de la agrupación de la provincia de Ciego de Ávila, explicó que el empleo de las estatuas vivientes, muy famosas en Europa y América Latina, le permitió al conjunto hacer algo diferente al tradicional teatro callejero.

Troya, una leyenda de barro, tiene un antecedente en Medea, pieza basada en la tragedia homónima de Eurípides, ambas montadas con un énfasis primordial en la dramaturgia, y en la posibilidad de contar la historia desde una particular forma de expresión.

Para presentarse en las calles también llegaron a la cita de las artes escénicas en Camagüey los espectáculos ¡Ay, Margarita!, de Teatro Andante, de la provincia de Granma, y En busca de una antigua ilusión, de Teatro TECMA, de Pinar del Río.

Los inicios del teatro callejero se remontan a la antigua Grecia, donde los viajeros llegaban a la ciudad de Atenas y contaban sus aventuras.(AIN)