Crece en Cuba demanda de controlador biológico Hebernem

Camagüey, 16 abr. -El Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) de la provincia de Camagüey incrementará este año la producción del bio-nematicida Hebernem, ante la alta demanda de ese agente de control biológico en las casas de cultivo protegido de toda Cuba.

Cerca de 100 hectáreas a lo largo del país se esperan cubrir, más del doble de lo ofertado en 2013, fundamentalmente en las provincias de Ciego de Ávila, Santiago de Cuba y Matanzas, donde esa modalidad de la agricultura tiene gran presencia, confirmó a la AIN Eduardo Smith, especialista comercial de la entidad.
   
El Hebernem está registrado y se comercializa hace más de cinco años en formulaciones sólida y líquida, y se emplea para el control de fitonemátodos en viveros de tomate, melón, pimiento, pepino y otros vegetales.
   
Por sus características de rotación y sobreexplotación del suelo, el cultivo protegido es uno de los más afectados por la presencia de gusanos nematelmintos, patógenos que habitan en las raíces de las plantas dificultando la absorción de nutrientes, y de los cuales las hortalizas son hospederos por excelencia.
   
Según explicó Rolando Morán, uno de los investigadores líderes del proyecto del bionematicida, el microorganismo o principio activo del producto actúa sobre los nemátodos, a través de la liberación de gases de sulfuro de hidrógeno y producción de quitinasas, enzima que rompe los huevos y daña las larvas.
   
También se ha comprobado su eficacia para estimular el  crecimiento vegetal, y es totalmente inocuo tanto para las plantas como para el hombre y el medio ambiente, a diferencia de los nematicidas químicos, considerados entre los plaguicidas más tóxicos.
   
Una investigación publicada por el Centro de Información y Gestión Tecnológica de la provincia de Sancti Spíritus, disponible en Internet, enuncia la superioridad del Hebernem para el control de esas plagas sobre agroquímicos de altos costos como el Agrocelhone.
   
Además, con ese desinfectante de suelos se consumen más de 370 litros por hectárea, referencia la página argentina Informe Frutihortícola, en tanto con Hebernem solo se necesitan 30, en un ciclo de tres aplicaciones cada 21 días, que mantienen su efecto durante todo el ciclo de vida del cultivo.(AIN)